Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico

Buscador de medidas

En su compromiso por la promoción de la conciliación corresponsable y el impulso de las medidas de conciliación la Dirección de Infancia, Adolescencia y Familias ha encargado a la Universidad de Deusto un estudio sobre la conciliación en las empresas de Euskadi con el que se pretende destacar las principales medidas que se adoptan en la Comunidad Autónoma Vasca y su impacto desde la perspectiva de las personas trabajadoras. El objetivo, más allá de identificar las medidas de conciliación actualmente disponibles en las empresas vascas, es analizar la cultura de conciliación, conocer la experiencia de las personas y su nivel de satisfacción.

Para conocer estas distintas realidades en torno a la conciliación, se han realizado entrevistas a 1.129 personas trabajadoras de los tres territorios, de diferente sexo, edad y sector de actividad.

Junto al estudio, se ha elaborado un informe detallado en el que se puede contrastar la impresión que causan estas medidas en las personas trabajadoras y una herramienta interactiva con la que poder explorar de forma dinámica los datos recogidos.

Tal y como se muestra tanto en el informe del estudio, como en la herramienta, hay un desajuste generalizado entre las medidas que declaran necesitar las personas trabajadoras y la disponibilidad de estas medidas por parte de las empresas. De igual manera, hay un desajuste entre las medidas que ofrecen las empresas y las que demandan las personas trabajadoras.

Cabe destacar los resultados obtenidos de la encuesta realizada en torno a la Cultura de la conciliación, en la que la media global (3,40 sobre 7), sugiere que la conciliación no está plenamente normalizada o integrada en la cultura empresarial. A fecha actual, aún se percibe un coste profesional por acogerse a medidas de conciliación y se sigue asociando a una menor implicación profesional. Como contrapunto positivo, hay que destacar que las personas encuestadas indican que en la medida de lo posible sus empresas adaptan las medidas de conciliación a las necesidades de cada persona, y el resultado de la encuesta de satisfacción muestra una media de 4,46 sobre 7.

Profundizando en el informe y la herramienta, se confirma cómo hay diferencias significativas del tiempo destinado al cuidado de las hijas o hijos, o personas dependientes a su cargo, en función del aumento de los requerimientos de presencialidad física. Es decir, la flexibilidad espacial, la posibilidad de trabajar desde casa o en esquemas híbridos, favorece una mayor dedicación al cuidado familiar.

De igual modo, el informe intenta discernir por qué existiendo medidas de conciliación disponibles, muchas veces no se hace uso de ellas, poniendo en relieve las barreras que dificultan su aprovechamiento (miedo a represalias y estancamiento profesional, impacto económico, falta de comunicación…). También se destacan los retos de las empresas para la conciliación, entre ellos el hecho de que las medidas deben estar disponibles, pero también ser accesibles, conocidas y libres de estigmas. Muchas personas trabajadoras no utilizan las medidas disponibles por desconocimiento, por no ajustarse a su necesidad personal o por temor a represalias. Es necesario alinear la política de conciliación con las prioridades reales de la plantilla, para avanzar hacia una organización más eficiente.

En este sentido, las conclusiones del informe destacan una serie de recomendaciones en relación a las medidas de conciliación, entre ellas, la de considerar medidas como el trabajo a tiempo parcial, revisar la utilidad real de las medidas más disponibles pero poco valoradas o mejorar la comunicación interna, y una serie de recomendaciones para mejorar la cultura de conciliación en las empresas para ir progresivamente a una mayor aceptación del equilibrio vida-trabajo, valorando la conciliación como una herramienta de atracción y retención del talento.