Departamento de Cultura y Política Lingüística

133. Puente colgante (Portugalete-Getxo)

ETAPA 8: PORTUGALETE • KOBARON

Un hito de la Humanidad en el Camino de Santiago

En este punto nos hallamos ante uno de los hitos constructivos más importantes de la revolución industrial europea. Antiguamente la comunicación entre Portugalete y Las Arenas se hacía por el sistema tradicional del pasaje en barca, que aún continúa en la actualidad. En este paso situado en plena desembocadura de la ría del Nervión-Ibaizabal la distancia a salvar era de 160 metros. En una zona con un intenso tráfico marítimo de mercancías y aún expuesta a los temporales, la solución técnica no era fácil, pero el arquitecto-ingeniero Alberto de Palacio (Sara 1856 – Getxo 1939) que vivió desde niño en el muelle de Portugalete, se decidió por la construcción de un puente colgante transbordador. Cualquier otro tipo de infraestructura no salvaba el problema técnico de unir grandes distancias preservando la libre navegación.

En 1890 Alberto de Palacio constituye una sociedad mercantil para llevar a la práctica su proyecto y encarga la realización de la obra a Fernando Arnodin, ingeniero francés experto en la explotación y construcción de puentes colgantes, recomendado por Gustave Eiffel. La obra comenzó el 1 de junio de 1890, pero las disensiones entre el arquitecto de Palacio y el contratista Arnodin se hacen patentes tanto durante el proceso de construcción, como a la hora posterior de adjudicarse la autoría. El puente de Bizkaia fue inaugurado el 28 de julio de 1893 tras hacer las pertinentes pruebas de resistencia cargado con 40 toneladas de peso. Los primeros viajes los realizaron en su barquilla colgante las personas ilustres de la burguesía del momento, no en vano el puente pasó a unir dos estaciones balnearias muy de moda en la época, donde se recibía un turismo distinguido a finales del siglo XIX. Por ejemplo, pocos días después de la Inauguración la infanta Isabel visitó el puente y le agradó tanto que, al parecer, hizo siete viajes.

El puente sufrió un ataque durante la guerra civil española. Los ingenieros del republicano Ejército del Norte derrumbaron la pasarela mediante cargas explosivas el 17 de junio del año 1937 para evitar el paso de las tropas nacionales, pero se reconstruyó para el 19 de junio 1941. Desde entonces hasta la actualidad, el puente no ha cesado en su actividad.

En el año 2006 el Comité de Patrimonio Mundial de la UNESCO, inscribe el nombre de Puente de Bizkaia en su lista. Sse convierte así en el primer monumento Patrimonio de la Humanidad del País Vasco y el primero con carácter de Patrimonio industrial del Estado, considerándolo una de las más destacadas obras de arquitectura del hierro de la Revolución Industrial y destacando su uso innovador de los cables de acero ligero trenzado.

Características técnicas y alcance

El ambicioso proyecto consistía en la construcción primero de cuatro torres metálicas de 62 metros de atura, dos en cada orilla de la ría, que sostenían una pasarela de 8 metros de ancho suspendida a 45 metros de altura. Bajo la pasarela iban dos railes por donde se desplazaba un tren de rodillos que es lo que hacía moverse de una margen a otra la barquilla del transbordador, que se hallaba colgando de 18 cables oblicuos.

El puente de Bizkaia une funcionalidad con belleza, es el puente colgante transbordador más antiguo del mundo y uno de los ocho puentes colgantes que aún se conservan. Tiene el valor de ser el único puente colgante del mundo en funcionamiento 24 horas los 365 días del año (también funciona el de Rochefort –Francia- de abril a noviembre). De momento, aparte de por su belleza y valor patrimonial, su funcionalidad está garantizada, dado que aún hoy día, continúa ahorrando un desplazamiento de un total de 20 kilómetros aguas arriba para cruzar la ría.

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