La Red de Control de la Calidad del Aire está formada por estaciones distribuidas por todo el territorio vasco. Actualmente cuenta con 55 estaciones, de las cuales 18 están vinculadas a actividades industriales.
Estas estaciones se clasifican según:

• El área geográfica: rurales, urbanas o suburbanas.
• El origen de la contaminación: tráfico, industria o fondo (cuando recoge una mezcla de varias fuentes).

Además de las estaciones fijas, la Red dispone de equipos móviles para realizar campañas indicativas en distintos puntos del territorio.
Actualmente se cuenta con:

• 3 furgonetas móviles y 1 remolque móvil equipados con analizadores automáticos.
• 2 laboratorios móviles para medir contaminantes de distinta naturaleza.

Estos equipos permiten conocer y vigilar la calidad del aire en lugares y momentos concretos, facilitando la adopción de medidas cuando sea necesario. Además de los contaminantes habituales, pueden analizar compuestos orgánicos volátiles y metales pesados, entre otros.

Por otro lado, aunque las mediciones automáticas se realizan en tiempo real, la Red también dispone de puntos de medición manual para ciertos contaminantes, cuyos análisis se llevan a cabo en el Laboratorio de Salud Pública.

Para ello se utilizan captadores manuales de PM₁₀, cuyas muestras (filtros) se trasladan al laboratorio para su análisis según los métodos de referencia. Cada muestreo dura 24 horas, obteniéndose datos diarios.
Los contaminantes medidos de esta forma y regulados por la normativa vigente son: As, Cd, Ni, Hg, Pb y Benzo(a)pireno.

Cada estación, ya sea fija o móvil, dispone en su interior de analizadores o monitores que miden la concentración de los contaminantes.
Estos equipos funcionan de manera continua, 24 horas al día, 365 días al año, salvo en caso de avería. El proceso consiste en tomar una muestra del aire ambiente, previamente acondicionada y homogeneizada, y analizarla en intervalos que varían entre 10 segundos y 15 minutos, según el contaminante.

Cada analizador está conectado permanentemente al terminal de adquisición de datos, que recopila los resultados de cada análisis. Cada 15 minutos, el sistema calcula una media y la almacena. Estos datos se transmiten de forma continua al centro de datos ubicado en Bilbao.

Una vez recibidos, se realiza una validación automática mediante el software de explotación de datos de la Red, y posteriormente se publican en la página web. Finalmente, los datos son verificados manualmente por un técnico cualificado.

En la Red los contaminantes que se miden con analizadores automáticos son el dióxido de azufre (SO₂), dióxido de nitrógeno (NO₂), monóxido de carbono (CO), Ozono, benceno y partículas (PM10 y PM2.5). Los  analizadores automáticos toman la muestra de aire a tiempo real y se basan en métodos físicos o químicos para detectar el gas o partícula que se quiere medir.  La técnica de medida es específica para cada contaminante. 

Los métodos se indican en la tabla siguiente: