El denominado “bingo electrónico” es una versión del bingo derivado, que recoge un tipo de apuesta basada en el bingo tradicional. La modalidad electrónica se desarrolla también en las salas de bingo pero, a diferencia del bingo tradicional, lo hace a través de sistemas, soportes y equipos informáticos, independientes de los utilizados para la modalidad clásica.

Según se determina en el Reglamento que hoy entra en vigor, en el bingo electrónico los jugadores participan adquiriendo cartones virtuales en terminales electrónicos en los que disponen de una cuenta. Los cartones, generados gráficamente en una pantalla por una aplicación informática, deben estar identificados mediante un número, una serie, un valor y un código de seguridad únicos. La extracción de las bolas, por su parte, se realiza mediante un sistema informático de generación aleatoria.

El precio de cada cartón no podrá ser superior a los seis euros y el importe máximo que se podrá jugar en cada partida no podrá superar los 200 euros.

Todo el proceso informático debe garantizar la seguridad y la transparencia del juego y su control absoluto por parte de la Dirección de juego responsable, para lo que deberá disponer de los mecanismos necesarios de trazabilidad sobre el registro de las operaciones realizadas, así como el almacenamiento de los datos de cada partida celebrada (número de cartones vendidos, importe de las ventas, números extraídos, cartones premiados y cuantía de los premios). Todo el sistema se deberá sustentar en cada empresa sobre una “Unidad central de proceso de datos”, un dispositivo que permitirá a los servicios de inspección y control del juego comprobar, en cualquier momento, el correcto funcionamiento de todo el proceso de juego.

El Reglamento prevé también la posibilidad de interconectar las salas de bingo vascas con las de otros lugares del Estado, de manera que se puedan compartir partidas simultáneas, con premios de mayor entidad sobre una bolsa común.

Con la entrada en vigor del Reglamento del Juego de Bingo Electrónico la Dirección de Administración Electoral, Juego y Espectáculos del Gobierno Vasco da un paso adelante en el desarrollo de la normativa reguladora del juego en Euskadi, abordando la actualización de una modalidad de juego, el bingo, sólidamente instalada en nuestro territorio, para que pueda beneficiarse de las posibilidades que ofrecen las modernas tecnologías en cuanto a versatilidad, agilidad y ampliación de la difusión. Todo ello, sobre una reglamentación rigurosa que garantiza y proteje los derechos de los ciudadanos.

Con su publicación en el BOPV ha entrado en vigor hoy en Euskadi el Reglamento del Juego del Bingo Electrónico. La nueva norma regula el funcionamiento de esta variante electrónica del bingo tradicional que, entre otras ventajas, prevé la posible interconexión de las salas de juego vascas con las de otras Comunidades Autónomas para compartir partidas simultáneas. El Reglamento establece unas bases estrictas de control de los sistemas electrónicos utilizados por las empresas, que deberán estar conectados en tiempo real con la Administración.