La consejera de Empleo y Asuntos Sociales,Gemma Zabaleta, ha inaugurado hoy en Bilbao la jornada de lanzamiento del Pacto Social porla Inmigración. Eneste marco ha presentado a los agentes sociales y a las instituciones el proceso que concluirá en el documento definitivo tras un proceso abierto de participación y diálogo.

Con la jornada de hoy, el departamento que dirige Zabaleta da inicio a una ronda de presentaciones del documento-base del pacto a las principales entidades del sector, que podrán discutir el texto y trasladar sus propuestas a la comisión asesora encargada de su redacción. Los profesores Daniel Innerarity e Imanol Zubero encabezan este nutrido grupo de expertos del ámbito universitario, social, económico y político.

El documento parte del convencimiento de que la Euskadi de mañana será una sociedad más diversa de lo que ya es actualmente, y ese fenómeno no será consecuencia de la inmigración extranjera sino que es consustancial a todas las sociedades modernas. Ante ese reto, el de la convivencia entre diferentes, el pacto diseñado por el Gobierno ambiciona “una sociedadplural e inclusiva donde las libertades, los derechos y las obligaciones fundamentales de todas las personas pivoten sobre la condición de la residencia, y no sobre la distinta condición de nacionales o extranjeros”.

En este sentido, Zabaleta ha recalcado en su intervención que “si no apostamos firmemente por una efectiva aplicación del principio de igualdad relegaremos a las personas inmigrantes a una situación inferior respecto a la población autóctona. Y resulta inasumible aceptar el trato discriminatorio como premisa en el reconocimiento de los derechos de las personas inmigrantes”.

Actualmente, en Euskadi están empadronadas 144.500 personas extranjeras, lo que supone el 6,6% de la población vasca, frente al 12,2% en el conjunto del Estado. Según la Encuesta de población inmigrante en Euskadi, otros 35.000 extranjeros han accedido a la nacionalidad española en los últimos años. En consecuencia, un 8,2% de la población vasca es de origen inmigrante (extranjera), en su mayoría de procedencia latinoamericana (42,4%) y de la UE (24,9%). El país de origen mayoritario es Rumanía (11,2%), seguido de Marruecos (10,08) y Colombia (8,4%). En el extremo de la cola se sitúan Moldavia, República Democrática del Congo y Guinea, los tres con un 0,3% de la población inmigrante en Euskadi. Por sexos, el 51,4% son hombres y el 48,6%, mujeres.

La diversidad es una oportunidad para la sociedad vasca. Según revelan las encuestas, una gran mayoría de estas personas aspiran a permanecer en Euskadi. Casi 9 de cada 10 personas desean quedarse entre nosotros al menos durante los próximos cinco años.

Para los redactores del documento base del Pacto social por la Inmigración, este hecho debe hacer cambiar la perspectiva sobre la inmigración, por tratarse de una realidad estructural y no de un fenómeno transitorio. En su opinión, en adelante, el esfuerzo social e institucional deberá centrarse no tanto en la acogida como en la gestión de la diversidad y, sobre todo, en la integración del colectivo inmigrante y de las segundas generaciones (hijos e hijas), éstas últimas,  fundamentalmente, a través de la educación.

Para los componentes de la comisión asesora, la voluntad de permanencia expresada por la población inmigrante exige repensar las ideas vigentes y los mecanismos y procesos de empadronamiento, regularización, reagrupación y nacionalización. “No puede ser que las leyes no acompañen esta voluntad de permanencia, condenando a las personas inmigrantes a la excepcionalidad”, ha afirmado la consejera.

Pacto social por la inmigración (pdf, 207 kb)

La inmigración en Euskadi (pdf, 72 kb)

Miembros de la comisión asesora (pdf, 17 kb)