Las personas que trabajen con menores de edad de manera laboral o voluntaria deben acreditar que no tienen antecedentes penales por delitos sexuales. El trámite es obligatorio desde el 1 de marzo de 2016.
El objetivo es proteger a las personas menores de edad de posibles situaciones de riesgo. Los datos se compararán con un registro de delincuentes sexuales creados para tal fin.
Las entidades y las personas jóvenes que lo tengan que solicitar disponen de la información y los pasos a seguir para su tramitación individual o grupal en Euskadiko Gazteriaren Kontseilua (EGK).
