La población adolescente acepta la diversidad afectivo-sexual, familiar y de género existente y muestra respeto hacia los colectivos LGTBI pero perduran fobias más sutiles
17 de mayo de 2017
- En general son prácticamente inexistentes los discursos públicos o las verbalizaciones directas de rechazo hacia la diversidad
- El 17 de mayo se celebra el día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia
- El colectivo adolescente no siempre cuenta con referentes cercanos que permitan tener una visión integral de los colectivos LGTBI
- Estudio ‘Lesbofobia, Homofobia y Transfobia en el sistema educativo’
La población adolescente vasca acepta la diversidad afectivo-sexual, familiar y de género existente y muestra respeto hacia los colectivos LGTBI (conformadas por lesbianas, gais, trans, bisexuales e intersexuales). En general son prácticamente inexistentes los discursos públicos o las verbalizaciones directas de rechazo hacia la diversidad. Además, la diversidad familiar y relacional está cada vez más interiorizada. Aun así perduran fobias más sutiles y más difíciles de detectar. Hay adolescentes que no muestran conductas fóbicas racionales, pero pueden, por ejemplo, sentir incomodidad ante lesbianas y gais o mostrar desagrado ante manifestaciones de afecto entre personas del mismo sexo. No obstante, cuando mayor es el cuestionamiento de los roles de género o de la heteronormatividad, se detectan menos prejuicios, actitudes de rechazo o conductas irrespetuosas.
Estas son algunas de las conclusiones que se extraen del estudio ‘Lesbofobia, Homofobia y Transfobia en el sistema educativo’ del Gobierno Vasco que los Departamentos de Empleo y Políticas Sociales y Educación han presentado hoy. La investigación ha sido elaborada por Fundación EDE, en respuesta a la demanda realizada por el Servicio Berdindu, servicio público del Gobierno de información y atención para los temas relacionados con la diversidad afectivo-sexual y familiar, y las identidades de género. La presentación coincide con la reivindicación este miércoles 17 de mayo, del Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia.
“La lucha contra la LGTBIfobia es una defensa del principio de igualdad, la dignidad y los Derechos Humanos de todas las personas”, ha señalado hoy Ernesto Sainz, Director de Política Familiar y Diversidad del Gobierno Vasco en la rueda de prensa celebrada para presentar el documento. “La diversidad es nuestra riqueza y todos los esfuerzos que se hagan contra todo tipo de discriminación y violencia hacia las personas LGTBI son un progreso colectivo hacia una sociedad cada día más inclusiva y menos excluyente, más justa y respetuosa, en definitiva más igualitaria”.
La directora de Innovación Educativa, Lucía Torrealday, ha destacado que la escuela representa un espacio privilegiado para abordar tanto la diversidad afectivo-sexual y familiar como las identidades de género. “Si hay algún lugar o ámbito en el que estas cuestiones se abordan y trabajan de manera preventiva y con especial sensibilidad, éste es el ámbito escolar -ha asegurado-, tanto por la sensibilidad del propio Departamento de Educación hacia este tema, como por la de los docentes que trabajan en nuestros centros. Debemos seguir trabajando en esta línea. Para ello es imprescindible que la comunidad educativa se convierta en un agente activo ante la lucha contra la LGTBfobia, desde la prevención y la atención adecuada”.
Sin embargo, ha aclarado que “el trabajo de los centros por sí solo no basta, necesitamos la implicación de la sociedad, de los medios de comunicación y, como no, de las familias”. Torrealday se ha referido también a las herramientas y planes de los que disponen los centros educativos vascos para seguir avanzando en esta materia, entre los que ha citado el Plan Director para la Coeducación y Prevención de la violencia de género en el sistema educativo, y el Protocolo para los centros educativos en el acompañamiento al alumnado trans o con comportamiento de género no normativo y a sus familias.
La realidad de las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales ha experimentado un notorio avance en los últimos años: leyes que promueven sus derechos, incremento de su aceptación social, mayor visibilización, etc. Pero siguen existiendo estereotipos, prejuicios y creencias arraigadas socialmente que favorecen la permanencia de actitudes y conductas LGTBIfóbicas. Este estudio ha testado estas actitudes en el sistema educativo vasco, recogiendo las opiniones, valores, comportamientos y actitudes ante la diversidad afectivo-sexual y familiar y las distintas identidades de género en el entorno escolar vasco, sobre todo entre los y las adolescentes.
Ideas como que la homosexualidad y el lesbianismo es una moda o una actitud de postureo; que en las parejas de gais o lesbianas una persona hace de hombre y la otra de mujer; que se sabe si una persona es o no gay o lesbiana por su apariencia y sus gestos, etc. siguen estando en la mente de algunas y algunos adolescentes según las conclusiones del estudio. Por su parte, la bisexualidad se asocia en ocasiones a una moda y una actitud de postureo.
Sobre las personas trans, el estudio determina que su condición genera confusión por lo que las ideas que se asocian son más contradictorias: se las considera extrañas y a su vez valientes. Por último, la intersexualidad apenas se conoce, por lo que ni siquiera se tienen creencias preconcebidas.
Referentes
Las y los adolescentes no siempre cuentan con referentes a través de los medios de comunicación que permitan tener una visión más integral de los colectivos LGTBI. Los referentes más comunes sobre los que construyen su ideario son personajes de series y programas televisivos que, generalmente, están estereotipados y no responden a la realidad de los colectivos. En el caso de las lesbianas estos referentes televisivos son escasos, por debajo de los referentes trans, por lo que se observa una invisibilización mayor.
En general las chicas muestran una actitud más positiva (aceptan mejor las muestras de afecto entre personas del mismo sexo o las trasgresiones de género) y las conductas verbales que discriminan o enjuician a los colectivos son menos utilizadas que por los chicos. Los chicos, por su parte, afirman que les sería realmente difícil declarar a sus amistades masculinas que son gais, ya que creen que probablemente serían rechazados o ridiculizados.
De hecho, los pocos adolescentes LGTBI participantes en el estudio han declarado haber sufrido algún tipo de rechazo en alguna ocasión.
En cualquier caso, cuando mayor es el cuestionamiento de los roles de género o de la heteronormatividad, se detectan menos prejuicios, actitudes de rechazo o conductas irrespetuosas. En este campo son muchos los adolescentes que muestran gran sensibilidad con la igualdad entre mujeres y hombres y son capaces de cuestionar el reparto de roles tradicional. En general, la población adolescente parece aceptar la diversidad afectivo-sexual y familiar existente, mostrando respeto hacia los colectivos LGTBI.
LGTBIfobia
La LGTBIfobia podría describirse como el temor y rechazo hacia personas que pertenecen al colectivo LGTBI, que lo parecen o que imaginariamente se asocian con estas. El 17 de mayo de 1990, la Organización Mundial de la salud (OMS) eliminó la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales. Este hecho supuso un hito histórico y un paso muy importante para que la orientación y la identidad sexual empezaran a ser aceptadas como parte intrínseca de la diversidad existente en nuestra sociedad. Desde hace más de una década el 17 de mayo ha pasado a ser el Día Internacional contra todo tipo de odio y violencia dirigida a las personas LGTBI.
*Este estudio está promovido por la Dirección de Política Familiar y Diversidad del Departamento de Empleo y Políticas Sociales y la Dirección de Innovación Educativa del Departamento de Educación. Se encuadra en el marco de la iniciativa Escuela Segura: prevenir y afrontar la lesbofobia, homofobia y transfobia en la escuela. La investigación ha sido elaborada por Fundación EDE, en respuesta a la demanda realizada por el Servicio Berdindu, servicio público de información y atención para los temas relacionados con la diversidad afectivo-sexual y familiar, y las identidades de género, cuyo objetivo es ofrecer información y apoyo a toda aquella persona lesbiana, gay, trans, bisexual e intersexual y entorno que así lo solicite.
