Dena dela. Sinopsis

La poesía no es más que el resultado de la búsqueda de algo, muchas veces sin saber qué es realmente lo que buscamos: puede ser una inquietud interior, una emoción provocada por algún elemento exterior o, quién sabe, puede ser una reflexión filosófica, o un camino hacia la épica, puesto que la poesía no abarca un campo concreto.

En la antigüedad, los filósofos y los que se consideraban poetas, en los tiempos en que proliferaban los dioses, crearon una cosmogonía y una visión del mundo similares. Y más tarde surgieron las disputas entre ellos.

En la antigüedad, los romanos adornaban sus casas con mosaicos y en ellos reflejaban su mundo dibujado de una manera fragmentaria, no tenían más que mirarlos para saber qué era lo que les rodeaba.

Este libro es, por así decirlo, un mosaico formado por fragmentos de todos los ámbitos de la vida, y es también reflejo del mundo del poeta.

O mejor dicho, en este libro se advierte una lucha constante entre la filosofía y la poesía, una lucha que nunca ha cesado. De hecho, aunque ni una ni otra no quieran reconocerlo, la poesía y la filosofía cultivan los mismos campos y beben de la misma fuente.

Y aparte de todo esto, a través de este libro se intenta dar respuesta a múltiples preguntas. Es un intento de buscar la respuesta a muchas preguntas de la vida.

Puede que la respuesta esté en alguna otra parte, pero tal y como dice el poeta: vivimos en cualquier caso; o lo que es lo mismo: escribimos en cualquier caso.