La escultura vasca desarrolla su vertiente más creativa e internacional a partir de los años 50.
Eduardo Chillida, Jorge Oteiza y Nestor Basterretxea participaron en la construcción del Santuario de Aranzazu inaugurado 1995. El monasterio es un conjunto artístico escondido en la montaña guipuzcoana.
Pero la escultura vasca también tiene en la actualidad nombres tan significativos como Txomin Badiola, Juan Luis Moraza o Ricardo Ugarte Zubiarrain.
Artes Plásticas
|