Recomendaciones útiles para el dolor de garganta
El dolor de garganta es un síntoma frecuente. La mayor parte de las veces se produce por una infección vírica que se acompaña con síntomas de resfriado, como mocos, lagrimeo, estornudos y congestión nasal. En estos casos lo que se tratan son los síntomas.
Solo en 1 de cada 10 personas, la causa de la infección es una bacteria, concretamente el Streptococcus A. En estos casos el dolor de garganta suele acompañarse con fiebre, inflamación de las anginas y no suele ir acompañado de los síntomas propios de un resfriado. Si existe sospecha de que la infección pueda ser causada por esta bacteria, se confirmará el diagnóstico a través de una prueba sencilla en el centro de salud y se indicará cuál es el tratamiento indicado.
El abuso del tabaco, el consumo de alcohol, respirar aire contaminado, forzar la voz, respirar por la boca y algunas alergias también pueden producir molestias de garganta.
Evita contagios
Para evitar contagios se deberán extremar las medidas de higiene:
- El lavado de manos es especialmente importante durante el tiempo en los que están presentes los síntomas. Lávatelas a menudo con agua y jabón y siempre después de toser, estornudar y sonarte.
- Mantente a la mayor distancia posible de las personas que presentan síntomas.
- Al toser o estornudar, procura cubrir la boca y la nariz con el brazo o con un pañuelo para retener las secreciones respiratorias.
- Hasta que te encuentres mejor, considera utilizar mascarilla si estás en contacto con otras personas.
- Utiliza preferentemente pañuelos desechables para sonarte los mocos y tíralos nada más usarlos.
Cómo aliviar los síntomas
- Evita fumar y exponerte a ambientes con humo.
- Se recomienda la realización de gárgaras con agua, miel y limón varias veces al día para aliviar las molestias al tragar.
- Para la tos seca con cosquilleo, son útiles las pastillas para la tos o caramelos duros.
- Aumenta la ingesta de líquidos. Los alimentos fríos o a temperatura ambiente reducirán la sensación dolorosa al tragar. Evita líquidos y alimentos calientes.
Consulta si...
- Notas dificultad para respirar.
- Tienes mucha limitación a la hora de ingerir alimentos incluso en forma líquida.
- Te aparecen manchas en la piel.
- La inflamación del cuello y/o garganta te incapacita para abrir la boca.
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