El Museo de Bellas Artes de Bilbao reabrirá en octubre el edificio de 1970

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El proyecto de ampliación del Museo de Bellas Artes de Bilbao a cargo de Norman Foster y Luis María Uriarte alcanza un hito relevante con la finalización de la reforma del edificio de 1970. Ejecutada al tiempo que se construye la nueva arquitectura Agravitas –ambos edificios compartirán el acceso desde la plaza Chillida y el núcleo vertical de comunicación–, esta importante rehabilitación permitirá, a partir de octubre de este año, desarrollar en este espacio actividades expositivas y educativas en la fase final de las obras.

Rehabilitación del edificio de 1970

Proyectado por los arquitectos Álvaro Líbano y Ricardo Beascoa entre 1963 y 1970 con un lenguaje internacional cercano a las propuestas de Mies van der Rohe, esta primera ampliación del Museo de Bellas Artes de Bilbao fue concebida para dotar a la ciudad de un equipamiento cultural destinado al arte más actual. Su vocación innovadora le concede el prestigio de ser el primer edificio de nueva planta construido para el arte contemporáneo en España. En las últimas cinco décadas, su arquitectura ha visto crecer una de las colecciones artísticas más relevantes del estado y uno de los programas expositivos más dinámicos y avanzados del País Vasco.

Su rehabilitación integral, que ha afectado a casi 6.000 metros cuadrados, responde fundamentalmente a la necesidad de adaptar la estructura y las instalaciones a las actuales normas de seguridad y protección contra incendios demandadas por las administraciones, y ha requerido de un proceso técnico de gran exigencia y complejidad, por tratarse de un elemento de alto valor arquitectónico. La intervención ha resaltado los rasgos más significativos del edificio, pero sin eliminar las transformaciones de las que ha sido objeto a lo largo del tiempo, como el cierre del porche original, acometido en dos fases (1983 y 1993) según el diseño de Rufino Basáñez y Álvaro Líbano. Asimismo, el núcleo de comunicación del edificio reformado servirá al volumen de la ampliación Agravitas, de modo que se evitan duplicaciones y se favorece la eficiencia operativa.

Con la apertura de la plaza Chillida y el traslado de la actividad pública al edificio de 1970 en octubre de este año dará comienzo al tramo final de las obras de la nueva arquitectura Agravitas y, al tiempo, se procederá a ejecutar, bajo la escalera monumental del hall Pedro de Icaza y Aguirre, el paso que comunicará el edificio original de 1945 con el nuevo atrio Arriaga.

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  • Fecha11 de Julio
  • Temática Museos, Patrimonio