La Vicelehendakari Mendia avanza la puesta en marcha de un plan integral de gestión de la edad durante la vida laboral

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  • Se persigue evitar que se pierda un solo recurso humano tan necesario para las empresas de Euskadi

La Vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, ha avanzado hoy la puesta en marcha de un plan integral de gestión de la edad durante la vida laboral de las personas que permita una gestión eficaz y eficiente, que aproveche todas sus capacidades y que evite que se pierda un solo recurso humano tan necesario para las empresas de Euskadi.

Mendia ha comparecido hoy para presentar diversos informes encargados a la Fundación Iseak y al Instituto Vasco de Competitividad-Orkestra con los que acreditar si hay una discriminación laboral real por edad, “más allá de la percepción social que así lo indica”, así como acerca de los factores que dificultan la adaptación a los nuevos empleos por parte de las personas con más edad. Asimismo, se ha preguntado sobre las dificultades que encuentran las empresas para hacer frente al relevo generacional ante la realidad demográfica que estamos viviendo.

Estos trabajos surgen de la preocupación del Departamento que preside por analizar “la gran paradoja de la gran revolución que estamos viviendo”, esto es, cuál es la realidad de las personas trabajadoras cuando cumplen 45 ó 50 años, “cuando sus empresas tienen que abordar grandes cambios y lo primero en lo que piensan es en prescindir de quienes creen que no se van a adaptar, pero, de forma paralela, reclaman personas adaptadas a las nuevas demandas”.

Esa preocupación ya está recogida en la Estrategia Vasca de Empleo 2030, trabajada con los agentes sociales y pactada en el Parlamento, que apunta, ha insistido, “a las oportunidades de competitividad para las empresas si aprovechan el potencial laboral de todas las personas con un reto transversal, la igualdad de oportunidades, lo que expresamente obliga a luchar contra el edadismo”. En concreto, contempla un compromiso por impulsar programas para romper la barrera social que impide a las personas, cuando caen en el paro y tienen más de cincuenta años, reengancharse al empleo.

Se trata, ha avanzado la Vicelehendakari, “de una mirada estratégica a una cuestión que, hasta el día de hoy, no había sido tratada de forma integral por las políticas públicas” y que también aparece en el Libro Blanco de Empleo presentado en público el pasado mes de febrero. Mendia ha apuntado que ya hay algunas subvenciones, pero no una atención completa a “una cuestión que va a condicionar nuestro futuro si no sabemos incorporar en plenitud de derecho a las mujeres, a los jóvenes y a quienes tienen experiencia y grandes capacidades para adaptarse a los cambios, aunque tengan más edad”.

Los estudios presentados hoy, y trabajados desde diferentes perspectivas, confluyen “en la necesidad no sólo de no desperdiciar una sola capacidad, sino de conectar generaciones para la transmisión bidireccional de habilidades y conocimientos”.

Gestión eficaz y eficiente de las personas

Por todo ello, la Vicelehendakari ha manifestado su intención de “completar un plan integral de gestión de la edad durante la vida laboral, que permita a las empresas una gestión eficaz y eficiente de las personas, que aproveche todas sus capacidades, que les permita adaptarse y no perder un solo recurso humano”, porque “en Euskadi no sobra nadie, en ningún momento de su vida laboral”.

Esa necesidad de “no abordar de forma parcelada el acceso al empleo de jóvenes y mayores”, ya forma parte de las actuaciones estructurales del Departamento de Trabajo y Empleo. En este sentido, Mendia ha recordado que el pasado año se incorporó la gestión de la edad en el Plan Estratégico de Empleo, Osalan lo hizo también en la Estrategia de Seguridad y Salud en el Trabajo y Lanbide, entre sus nuevos programas, asesora a las pymes para la conexión de las nuevas generaciones con las ya empleadas, con el programa Lan Mentoring.

Finalmente, ha avanzado que, si bien se trabaja en la definición del plan de gestión, las nuevas líneas específicas para personas de más de 45 ó 50 años que se van a trasladar a los agentes sociales hablan de fomentar su contratación al estilo del programa Lehen Aukera, y de fomentar una cultura social y empresarial que aproveche este caudal de experiencia que no puede desperdiciarse.

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