El paro sube en enero en 2.107 personas y se cierra el mes con 112.905 desempleados

2 de febrero de 2023

Enero ha cerrado con 112.905 personas en paro. Son 2.107 más que en diciembre y 3.039 menos que los que había hace un año. Todo ese paro nuevo viene prácticamente del sector servicios, con una pequeña excepción, pero no significativa, en Álava. La cifra total es la más baja desde este mismo mes en 2009, y el incremento de paro es el más bajo en términos relativos de lo que llevamos de siglo.

También desciende el número de personas afiliadas a la Seguridad Social en 9.762 personas. Pero es una cifra análoga a otros meses de enero incluso en épocas de expansión económica, con caídas cercanas a las 10.000, en algunos casos incluso mucho mayores. De hecho, hoy hay 10.729 personas más cotizando y con derechos que hace un año, y la cifra total sigue situándose en los máximos históricos.

Sin duda en esta evolución tiene mucho que ver la reforma laboral y la incidencia en la contratación indefinida como principio rector. La nueva norma se aprobó hace justo un año, aunque las empresas habían comenzado a corregir la forma de contratar con anterioridad, y tuvieron todavía tres meses más de plazo para ajustarse al nuevo marco.

Esto ha hecho que el número absoluto de contratos descienda de forma significativa: se contrata menos porque se contrata estable. Y se vuelve a confirmar este mes, donde un 26,75% de los nuevos contratos son indefinidos.

Por tanto, estamos analizando el único mes del año en el que, junto a agosto, siempre se repite el patrón de más parados y menos afiliados, pero con algunas similitudes y algunas diferencias. La principal similitud es el efecto de principios de año y, sobre todo, de cierre de las campañas navideñas en comercio y hostelería, pero también de sustituciones por descanso en la atención por cuidados. Y esto se refleja en que la práctica totalidad de ese nuevo paro corresponde a mujeres.

Entre las diferencias, que, a pesar de todo, se mantiene la reducción progresiva del paro de larga duración, uno de los principales problemas del mercado laboral en Euskadi. Y que, fuera de las actividades de servicios, los demás sectores no se han visto afectados por ese factor de inicios de año. El resultado es que estemos en el mejor enero en cuanto a afiliación y una recuperación de la contratación indefinida, lo que demuestra el acierto de la reforma laboral acordada por el Gobierno de España con los agentes sociales.

Hoy, todas las instituciones y todos los agentes sociales y económicos somos conscientes de que las dificultades van a seguir. Pero este primer mes del año, con un paro contenido y cifras de afiliación en máximos, vuelve a demostrar: la solidez mostrada por el tejido productivo en la recuperación tras la crisis pandémica y la resistencia a pesar de los efectos de la guerra en Ucrania; el acierto de la reforma laboral y de la concertación social; y la necesidad de apuntalar políticas innovadoras que favorezcan la estabilidad en el empleo de las personas que tienen más dificultades.