El Lehendakari aboga por defender conjuntamente los intereses atlánticos para no quedar "fuera de foco"

Fecha de publicación: 

  • Euskadi, Galicia, Asturias y Cantabria proponen impulsar el Eje Atlántico creando para ello una Macrorregión Atlántica
  • Un foro de trabajo y encuentro que articule, cohesione y dé visibilidad a la región atlántica y en el que participen los distintos niveles de gobierno
  • Los presidentes de Euskadi, Galicia, Asturias y Cantabria se han reunido para intercambiar reflexiones e iniciativas en torno a los retos comunes de los territorios atlánticos
  • La agenda común incluye, entre los temas más destacados, la red ferroviaria, el corredor del hidrógeno, la respuesta al cambio climático y la apuesta por la Especialización Inteligente

Los presidentes de Euskadi, Galicia, Asturias y Cantabria, Iñigo Urkullu, Alfonso Rueda, Adrián Barbón y Miguel Ángel Revilla, respectivamente, se han reunido, esta mañana, para intercambiar reflexiones e iniciativas en torno a los retos comunes de los territorios atlánticos.

En el encuentro convocado por el Lehendakari Urkullu como Presidente de la Comisión del Acto Atlántico, se han abordado cuestiones relacionadas con las interconexiones y la triple transición: verde, digital y socio-demográfica. La agenda común incluye, entre los temas más destacados, la red ferroviaria, el corredor del hidrogeno, la respuesta al cambio climático y la apuesta por la Especialización Inteligente. “Compartir esta agenda común nos anima a plantear un salto cualitativo”, ha señalado el Lehendakari.

En un contexto donde se está produciendo un desplazamiento del eje de influencia europeo hacia el este, en la reunión de hoy, se ha propuesto impulsar el Eje Atlántico dotándose para ello de una Macrorregión Atlántica, desde la que trazar una visión estratégica conjunta para actuar en defensa de nuestros intereses y no quedar “fuera de foco”. “Apostamos por Europa y no queremos perder capacidad de influencia”, ha señalado Urkullu.

Así,  se ha planteado la creación de un foro de trabajo y encuentro que articule, cohesione y dé visibilidad a la región atlántica y en el que participen los distintos niveles de gobierno en pie de igualdad: Unión Europa, Estados miembro, Comunidades y Regiones. Según ha explicado Urkullu, el objetivo es que, durante la Presidencia Española del Consejo de la Unión, el segundo semestre de este año, el Consejo Europeo mandate a la Comisión desarrollar una Estrategia Macrorregional para el Atlántico.

También se ha convenido la necesidad de trabajar como un “lobby atlántico” que movilice a las instituciones y a actores socioeconómicos. “Vamos a solicitar que la Presidencia de la Comisión Arco Atlántico participe en el Comité de Cooperación Fronteriza previsto en la Declaración de la Cumbre franco-española de enero. Pretendemos institucionalizar este foro anual haciéndolo extensivo a los Presidentes de todas las Comunidades Autónomas Atlánticas”, ha señalado.

“La defensa del Eje Atlántico no incumbe en exclusiva a las instituciones. Esta debe ser una apuesta colectiva que integre el impulso y la participación del conjunto de actores socio-económicos de nuestras Comunidades. Al fin y al cabo, está en juego el bienestar presente y futuro de nuestras sociedades”, ha apuntado el Lehendakari.

RED FERROVIARIA

El Corredor atlántico ferroviario, acumula una larga lista de retrasos por parte de los Gobiernos español y francés, y se vislumbran retrasos aún mayores. El año 2030 es la fecha marcada por la Comisión Europea para concluir la red básica del Corredor, sin la cual se perderá la oportunidad de conectarse de manera eficiente con la red de corredores que recorre el conjunto de la Unión Europea.

El escenario con el que trabaja el Gobierno francés en estos momentos, apunta que la conexión entre Burdeos y Dax en alta velocidad no llegará antes de 2042. Además, no se menciona cuándo llegará a Irún. Este planteamiento supondría un gravísimo incumplimiento de las obligaciones adquiridas por el Estado francés respecto del Corredor Atlántico Europeo.

Se observan, igualmente, retrasos e incumplimientos por parte del gobierno español. Por ejemplo, se acaba de adjudicar la redacción del proyecto de construcción del tramo Vitoria-Gasteiz-Burgos -red básica-, no será hasta la próxima década cuando entre en servicio.

Por tanto se exige, a la Comisión Europea y al Gobierno español, que hagan todos los esfuerzos para que la fecha de 2030 sea una realidad, también en Francia.

CORREDOR DEL HIDRÓGENO

En relación al corredor del hidrógeno, preocupa que el mapa de previsión de interconexiones de la denominada “Columna vertebral europea del hidrógeno” no contemple para 2030 la interconexión Atlántica del corredor HiWest y por el contrario sí contempla la del Mediterráneo. En este sentido, se solicita que el lado Atlántico del corredor no se quede en la frontera de los Pirineos y que entre a la península por el oeste en 2030, al igual que lo hará por el este. De esta manera se cierra el anillo alrededor de los Pirineos fortaleciendo así la conexión energética de los puertos del Atlántico y Mediterráneo de Francia y España para movimiento de hidrógeno, y sobre todo, existirá una doble conexión que no dejaría aislada la Península Ibérica de Europa en caso de problemas operativos o necesidad de mantenimiento en uno de los hidroductos.

OTROS ÁMBITOS DE COLABORACIÓN

Ligado al cambio climático, destacar que los territorios con litoral están más expuestos a los efectos del cambio climático, la población, las infraestructuras industriales y de transporte se concentran en la costa o en zonas de influencia mareal. En este sentido, estos territorios están llamados a arbitrar respuestas para paliar las vulnerabilidades. Por ejemplo, las soluciones que encuentre el industrializado puerto de Bilbao para proteger su infraestructura pueden ser válidas para Gijón, Vigo o Santander y viceversa. Se podría trabajar en el desarrollo de un sistema de anticipación y respuesta a eventos climáticos extremos o rediseñar la planificación urbana en las aglomeraciones costeras más vulnerables etc.

Los océanos son el destino final de ingentes cantidades de residuos de distinta naturaleza, que se acumulan y suponen una grave amenaza para la salud humana y los ecosistemas marinos. Además, son causa de pérdidas económicas, en particular en los sectores de la pesca, la acuicultura o el turismo. En 2021 la Comisión Arco Atlántico creó el “Grupo de Trabajo sobre Contaminación Oceánica” para orientar nuestras respectivas políticas con el fin de restablecer la salud del atlántico. Los socios de Arco Atlántico han suscrito una Declaración política “Compromiso a favor de un océano Atlántico limpio” y manifestando la voluntad de desarrollar la economía azul sostenible y la economía circular para hacer frente a la contaminación de los océanos con un enfoque holístico y desde la cooperación.

En el ámbito de la Especialización Inteligente del Atlántico -RIS 3, las respectivas estrategias  contienen apuestas comunes y ofrecen oportunidades para conectar ecosistemas de innovación e impulsar auténticas cadenas de valor atlánticas: Salud y Bienestar; Agroalimentación, Alimentación Sana y Segura; Energías Renovables; Tecnologías Marítimas/Recursos Marinos; Turismo y TIC.