Agurtzane Llano: "Es preciso facilitar a la juventud vasca su participación en el diseño de servicios y prestaciones y reducir la edad de emancipación"

8 de junio de 2022

  • “El sistema de juventud se ha de orientar al desarrollo creciente de la autonomía de las personas jóvenes impulsando la promoción de iniciativas juveniles y los servicios de emancipación”
  • Intervención de la directora de Juventud en el Parlamento Vasco para presentar diversos aspectos relacionados con los estudios y encuestas del Observatorio Vasco de la Juventud
  • “En relación con el empleo, la percepción de la situación es más favorable; el porcentaje de quienes creían que tendrían que ir a trabajar al extranjero sin desearlo se ha reducido a la mitad”

VG 08 06 2022

 La directora de Juventud del Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Agurtzane Llano, considera preciso “facilitar a la juventud que vive en Euskadi su participación en el diseño de los servicios y prestaciones, en las políticas de juventud y en la sociedad, desplegando sus proyectos de vida y siendo protagonistas de iniciativas institucionales, empresariales y sociales. Por ello, el Gobierno Vasco ha establecido el objetivo de reducir la edad media de emancipación a 28 años en 2030”.

 “Somos conscientes de los retos y prioridades de la juventud vasca, similares a los que el resto de la juventud europea plantea, aunque se parta de realidades, situaciones y expectativas o culturas en parte diferentes” ha destacado la Directora de Juventud.  Llano ha intervenido en la Comisión de Políticas Sociales y Juventud del Parlamento Vasco para presentar diversos aspectos relacionados con los estudios y encuestas del Observatorio Vasco de la Juventud centrándose en "Aurrera Begira. Indicadores de expectativas juveniles".

 “El sistema de juventud se ha de orientar al desarrollo creciente de la autonomía de las personas jóvenes impulsando aspectos que, hasta ahora, no han estado presentes con la suficiente intensidad: la promoción de iniciativas juveniles y los servicios de emancipación”, ha comentado Llano.

 A juicio de la directora “la emancipación y el tránsito de las personas jóvenes a la vida adulta requiere una apuesta por la cohesión de la sociedad y la equidad intergeneracional. El ejercicio de la ciudadanía activa y el desarrollo de competencias para la autonomía, atraviesan los tres ejes de la Ley de Juventud que acabamos de aprobar: sistema de juventud, emancipación y participación social”.

 “Nuestra juventud ha de constituirse en agente activo de las transiciones y de los nuevos procesos, caminos y cambios que está viviendo Europa y todo el mundo” ha insistido Llano. “Por ello, impulsar la mejora de las condiciones de vida de la juventud de Euskadi y, en particular, su emancipación, desde una perspectiva de igualdad de oportunidades para el desarrollo de sus proyectos de vida con autonomía, es un objetivo prioritario para el Gobierno Vasco”.

 Oportunidades

Llano ha recordado que la tasa de emancipación de la juventud vasca de entre 18 y 34 años se situaba en Euskadi -en el año 2019- en el 38,5%. La edad media de emancipación en 30,2 años, por un 49,6%, y en 26,3 años en la Unión Europea. “26 años es, precisamente, la edad a la que desean emanciparse -salir del hogar familiar de origen- el colectivo de jóvenes de Euskadi”.

En su intervención en la Cámara Vasca, Agurtzane Llano ha considerado que “el contexto social requiere redoblar nuestro esfuerzo. Las crisis sucesivas, por la pandemia y la invasión de Ucrania, preocupan y afectan a las personas jóvenes, reduciendo sus oportunidades para emanciparse. Además, las personas jóvenes están interesadas, implicadas, preocupadas y afectadas por otros cambios sociales a medio-largo plazo y, en particular, por las tres transiciones: climática-medioambiental, tecnológica-digital y social-demográfica”.

Cada año, el Observatorio Vasco de la Juventud analiza tendencias y situaciones de la juventud vasca. La IX edición del análisis Aurrera Begira, difundido este año, se ha basado en una encuesta online, de auto rellenado, con cuestionario estructurado y cerrado en la mayoría de las preguntas, junto a una veintena de entrevistas en profundidad de las que se realiza un análisis del discurso. Se han realizado entre personas jóvenes de entre 15 a 29 años de Euskadi: 4.356 encuestas (734 residentes en Araba-Álava, 2.085 en Bizkaia, 1.340 en Gipuzkoa y 197 fuera de Euskadi).

“En este último estudio Aurrera Begira, realizado en diciembre pasado, destaca lógicamente, el impacto de la covid 19 en la juventud vasca. De hecho, buena parte de los indicadores mostraban una evolución positiva desde 2013, que se ha visto ralentizada en 2020 y 2021 por el impacto de la crisis provocada por la covid 19” ha destacado Llano.

Según ha detallado la directora de Juventud “destaca el hecho de que el porcentaje de jóvenes que en el plazo de un año desearían vivir por su cuenta y creen que no van a poder hacerlo, sumado a quienes, ya emancipadas, creen que van a tener que regresar a casa sin desearlo, alcanza el 41% en 2020 y 42 % en 2021”.

Empleo, buena percepción

“En relación con el empleo, la percepción de la situación es más favorable ya que el riesgo de perderlo o del empeoramiento de las condiciones laborales que perciben quienes ya trabajan desciende del 48 % en 2020 al 42 % en 2021. Y el porcentaje de quienes creían que tendrían que ir a trabajar al extranjero sin desearlo se ha reducido a la mitad” ha añadido Llano.

En su intervención, Agurtzane Llano ha indicado que, “como es natural, los valores de los indicadores relacionados con el empleo van muy ligados al contexto económico. A partir de 2015 los indicadores fueron mejorando, pero a partir de 2020, con la pandemia, sufrieron un retroceso, si bien se mantienen mejor que en 2013. Otros datos, como la satisfacción personal o la confianza en el futuro han retrocedido. La satisfacción con el tiempo libre, las amistades, las relaciones sentimentales o sexuales han empeorado por las restricciones vividas en la pandemia”.

“Eso, junto con el empeoramiento de la situación económica, ha afectado a la valoración de la situación personal y, sobre todo, la confianza en el futuro. En la actualidad, de todas las preocupaciones y situaciones que vive la juventud de Euskadi destacamos, al igual que sucede con buena parte de la juventud de la Europa más avanzada: la necesidad de empleos apropiados tras la etapa formativa; una emancipación más temprana; viviendas más accesibles económicamente; posibilidad real de movilidad para la formación y prácticas; y la igualdad real de género” ha matizado Llano.

La futura Estrategia Vasca de Emancipación Juvenil tiene como principal objetivo incrementar la tasa de emancipación y rebajar la edad de emancipación de 30 a 28 años en 2030. 

Iniciativas

“En Euskadi no contábamos con políticas que evalúen en función de estos objetivos, carecíamos de políticas específicas de emancipación. Son políticas que, con la nueva ley de Juventud, la sociedad vasca y sus instituciones hemos adquirido el compromiso de impulsar, incidiendo sobre los factores objetivos -acceso al empleo y la vivienda, información y orientación- y subjetivos -expectativas personales o familiares y cultura de emancipación- que influyen en la salida del hogar familiar de origen y su consolidación” ha comentado Llano

Para ello, las iniciativas puestas en marcha por el Gobierno Vasco  se centran en la orden de ayudas a los Ayuntamientos para diseñar, sistematizar y evaluar políticas específicas de emancipación;  el diseño de la Estrategia Vasca para el Reto Demográfico, cuyo primer eje es el impulso de la emancipación juvenil; la Estrategia Vasca de Emancipación Juvenil, que estará disponible a finales de este año, y la Red Vasca para la Emancipación Juvenil, con el Servicio de apoyo a los itinerarios de las y los jóvenes–Gazteen ibilbideak Abian jartzeko Zerbitzua (GAZ).

“El Gobierno Vasco ha establecido el objetivo de reducir la edad media de emancipación a 28 años en 2030. Somos conscientes de los retos y prioridades de la juventud vasca, similares a los que el resto de la juventud europea plantea, aunque se parta de realidades, situaciones y expectativas o culturas en parte diferentes” ha destacado Agurtzane Llano.

“Trabajamos de lleno en el desarrollo de la Estrategia Vasca de Emancipación Juvenil impulsando políticas específicas que se diseñen y evalúen en función de un único objetivo: aumentar la tasa de emancipación y reducir la edad media a 28 años en el horizonte de 2030. Esta ha de ser una labor coordinada de los diferentes departamentos e instituciones del sector público y de la sociedad en su conjunto” ha concluido la Directora.