El autor donostiarra presenta hoy su nueva novela, 'La hora de las gaviotas', en el Aula DV. La cita es en el Aquarium y puede seguirse también por internet

El novelista Ibon Martín (San Sebastián, 1976) se ha convertido en un 'best seller' del género negro. Su anterior título, 'La danza de los tulipanes', se tradujo a ocho idiomas y figuró durante meses entre los libros más vendidos. Ahora publica 'La hora de las gaviotas', un thriller ambientado fundamentalmente en Hondarribia y su entorno y que arranca, precisamente, con un crimen en el Alarde mixto de Hondarribia.

Martín presenta hoy su libro, editado por el poderoso grupo Penguin en el histórico sello Plaza & Janés, en el Aula DV, que promueven El Diario Vasco y Fundación la Caixa. La cita será a las seis de la tarde, en horario temprano por las circunstancias. La charla podrá seguirse de forma presencial en el Aquarium, con todas las medidas sanitarias de seguridad y hasta completar el aforo, limitado al 50%, y también por internet a través de la plataforma auladv.diariovasco.com.

- Presente 'La hora de los gaviotas' a sus lectores, una novela que arranca un 8 de septiembre en pleno Alarde de Hondarribia.

- Sí, una ley no escrita del género aconseja comenzar con la mayor sacudida posible para el lector. He elegido el Alarde de Hondarribia, en pleno desfile del alarde mixto por la calle Mayor, en ese momento tan tenso en que se levantan los plásticos negros y hay pitos... En ese instante de confusión alguien aprovecha y asesina a una mujer dentro de la fiesta. Empieza entonces una investigación y descubrimos que hay más muertes. La acción se desarrolla fundamentalmente en torno a la bahía de Txingudi, Biriatou, Hendaia... Se trata de saber qué ha llevado a alguien a matar.

- Es un tema polémico. ¿Entra en el debate sobre el papel de la mujer en la fiesta o usa solo esa celebración como escenario?

- La mía es una novela negra, en la que cuenta más la trama, pero inevitablemente esa polémica se hace presente. El asesinato me sirve para llevar una historia a una zona, como Hondarribia, que me encanta y resulta tan sugerente. Desde el momento en que hay un crimen en el Alarde hay que entrar en los entresijos de lo que ocurre ahí cada 8 de septiembre. Y antes incluso de que la novela se publicara y pudiera leerse ya he recibido avisos de gente favorable al Alarde tradicional que ha llamado a boicotear el libro y lanza mensajes no muy favorables 

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