Osakidetza pone en marcha una nueva estrategia destinada a reforzar y mejorar la seguridad del paciente

Fuente: Irekia - Eusko Jaurlaritza - Gobierno Vasco

9 de Julio de 2014

El consejero de Salud del Gobierno Vasco, Jon Darpón, y el coordinador de Pogramas de Salud Pública y Seguridad del Paciente, Enrique Peiró, han presentado hoy públicamente la Estrategia de Seguridad del Paciente 2013-2016, cuyo objetivo es reforzar y mejorar la seguridad de los y las pacientes de Osakidetza.

Según el consejero de Salud, se trata de un salto cualitativo puesto que si bien “Osakidetza lleva años trabajando en este campo y han sido muchas las medidas desarrolladas en ese sentido, por primera vez se ha diseñado una estrategia conjunta, que además se ha plasmado en un documento para todas las organizaciones y al que cualquier profesional de Osakidetza tiene acceso. El objetivo: ser capaces de trabajar en red, coordinadamente y poniendo en conocimiento compartido todas las buenas prácticas de nuestros equipos para garantizar la seguridad  de todos nuestros pacientes independientemente de dónde sean atendidos”.

El propio Jon Darpón ha recordado que esta Estrategia responde al compromiso del Gobierno  Vasco con las personas, materializado en este caso en el ámbito de la Seguridad del Paciente, que constituye a su vez una de las líneas de actuación prioritarias contempladas ya en el Plan de Salud 2013-2020, en sintonía con las pautas de la propia OMS.

Tal y como subrayó, “Osakidetza ha alcanzado un significativo grado de reconocimiento por la calidad y la seguridad de sus prestaciones sanitarias; sin  embargo, el necesario incremento de la actividad, la creciente complejidad de los diferentes procedimientos y la legítima aspiración de las personas a ser cuidadas mejor, exigen profundizar en la búsqueda del máximo nivel de Seguridad para nuestros pacientes”.

                   

NUEVAS LÍNEAS DE ACCIÓN

Por ello la Estrategia de Seguridad del Paciente 2013-2016 hoy presentada no se limita únicamente a mantener y consolidar las líneas de acción actuales, sino que va más allá incorporando nuevos proyectos en el ámbito de la prevención de las infecciones asociadas a la asistencia sanitaria, la conciliación de la medicación, la identificación inequívoca de los pacientes y la implicación de los ciudadanos en su propia seguridad.

1. Identificación inequívoca de los pacientes

La correcta identificación de los pacientes en los centros sanitarios, asegurarse de que el paciente sobre el que se actúa es el correcto, es una medida fundamental para evitar errores en la atención que prestan los servicios de salud. Homogeneizar y mejorar los sistemas de identificación del paciente utilizados en las organizaciones de la red es un objetivo de Seguridad en Osakidetza para el período 2013-2016, abordando esta línea desde una triple vertiente: la identificación física del paciente hospitalizado, la verificación de la identidad del paciente en las aplicaciones informáticas corporativas y la identificación del paciente no hospitalizado en los diferentes puntos de atención de la red de Osakidetza

2. Conciliación de la medicación

Entendida como el proceso formal y protocolizado de obtención de una lista completa y precisa de los medicamentos que previamente tomaba el paciente y su comparación con la medicación prescrita después de una transición asistencial (al ingreso en el Servicio de Urgencias o Unidad de Hospitalización, al ser trasladado de Unidad o centro sanitario y/o al alta hospitalaria) con el fin de detectar las posibles discrepancias, omisiones, duplicidades y/o interacciones que precisen su corrección, la conciliación de la medicación constituye otra de las nuevas líneas de acción corporativas que se han puesto en marcha.

3. Implicación del Paciente en la Seguridad de la atención sanitaria

Implicar al paciente, además de a sus familiares y/o cuidadores, en la atención que se le presta desde el sistema sanitario resulta un elemento esencial en la mejora de la Seguridad del paciente y constituye un elemento estratégico de primer nivel. Que el paciente se responsabilice de su salud, seguridad y estilo de vida y se implique en sus cuidados permite aprovechar su conocimiento y experiencia sobre su propio problema para identificar riesgos y proponer barreras a problemas de seguridad. El paciente debe estar suficientemente informado de los beneficios y riesgos que conlleva su asistencia, pero no sólo eso, sino que además debe tomar un papel activo en la detección y resolución de fallos en la seguridad de cada acto relacionado con la atención sanitaria prestada. Para ello, desde el Departamento de Salud y Osakidetza se pondrán en marcha en los próximos meses campañas de sensibilización, folletos y material informativo, y la Estrategia de  Seguridad del Paciente se integrará en las plataformas electrónicas abiertas al ciudadano (Paciente activo, Carpeta de salud, etc.)

4. Reducción de las infecciones del tracto urinario asociadas a catéter urinario

Las infecciones del tracto urinario asociadas a catéter urinario constituyen una de las Infecciones Relacionadas con la Asistencia Sanitaria más prevalentes en todos los países desarrollados. Es por ello que, apoyándose en la última evidencia científica disponible, se hace necesario acometer la reducción de sus tasas mediante acciones corporativas encaminadas a consensuar las indicaciones de la cateterización urinaria, reducir en lo posible el tiempo que permanece cateterizado un paciente y mejorar la técnica de inserción del catéter y los cuidados que se prestan mientras este permanece insertado.

 

LÍNEAS PRE-EXISTENTES INCORPORADAS A LA ESTRATEGIA

 

  1. Prevención y control de las Infecciones Relacionadas con la Asistencia Sanitaria (IRAS)

La prevención y el control de las IRAS constituyen objetivos prioritarios para el conjunto del sistema sanitario de Euskadi desde hace más de dos décadas. Durante estos años se han desarrollado diferentes programas y proyectos entre los que cabe señalar: el Plan INOZ (Infekzio Nosokomialak Zaintzeko eta Kontrolatzeko Plana - Plan de Vigilancia y Control de las Infecciones Nosocomiales) que incluye todas las actividades de vigilancia, prevención y control de las IRAS en los hospitales de Osakidetza, y los proyectos Bacteriemia Zero y Neumonía Zero, estos últimos desarrollados a nivel del Sistema Nacional de Salud en coordinación con las Comunidades Autónomas para la prevención de las infecciones en las Unidades de Cuidados Intensivos.

  1. Cirugía segura

Esta línea de acción se enmarca en el reto mundial “La cirugía segura salva vidas” de la Alianza Mundial para la Seguridad del Paciente de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Entre las estrategias desarrolladas destaca el desarrollo de una lista de verificación de la seguridad de la cirugía, el Checklist quirúrgico, que Osakidetza tiene ya  incorporado a los sistemas de información asistenciales.

  1. Seguridad en el proceso asistencial gestación-parto-puerperio

Es uno de los ámbitos asistenciales en el que adquiere gran relevancia la seguridad del paciente y desde el que se pretende proteger tanto la seguridad de la mujer embarazada como la del neonato.

  1. Sistema de notificación y aprendizaje en Seguridad del Paciente (SNASP)

La necesidad de sistemas de registro de incidentes y eventos adversos, como punto de partida de la Seguridad del Paciente se contempla, desde el año 2004, en la Alianza Mundial para la Seguridad del paciente de la OMS. Esa necesidad se basa en la posibilidad de análisis de los eventos adversos acaecidos para poder entender qué ha fallado en el sistema, aprender del error y actuar en consecuencia para mejorar la asistencia prestada.

  1. Optimización de la prescripción de pruebas diagnósticas que utilizan radiaciones ionizantes

Las pruebas radiológicas constituyen una herramienta diagnóstica habitual en la práctica asistencial diaria de Osakidetza. Sin embargo la radiación utilizada en estas pruebas no está exenta de riesgos, y por ello todas las peticiones de pruebas radiológicas deben estar plenamente justificadas y deben aplicarse técnicas que minimicen la dosis, permitiendo obtener la información diagnóstica fundamental. Osakidetza está desarrollando un proyecto destinado a promover la optimización en el uso de las radiaciones ionizantes con fines diagnósticos en la población pediátrica, con los objetivos de racionalizar el uso de la radiación para el diagnóstico empleando la menor dosis posible, proporcionar datos sobre indicadores de dosis individual y colectiva y reforzar la sensibilidad al problema, por parte de médicos prescriptores y radiólogos en materia de protección radiológica.

  1. Buenas prácticas asociadas a la administración de la medicación

La reducción de los errores de medicación debe asumirse como un proceso continuo de mejora en el que deben incluirse diversas prácticas en cada una de las fases que constituyen la cadena de utilización de los medicamentos, implicando en su desarrollo e implantación tanto a profesionales sanitarios como a pacientes.

  1. Buenas prácticas asociadas a los cuidados de enfermería

Se incluyen fundamentalmente todas aquellas estrategias y actividades dirigidas a reducir la incidencia y prevalencia de úlceras por presión y caídas en los pacientes atendidos en nuestro sistema sanitario.

  1. Seguridad transfusional

La incorporación de medidas de seguridad en la utilización de componentes sanguíneos, tejidos y células, tanto a nivel organizativo como medidas clínico-epidemiológicas, de control analítico o destinadas a implantar Sistemas de Calidad, ha sido, y continúa siendo, una constante en Osakidetza durante las últimas décadas.

  1. Formación en Seguridad del Paciente

La formación de los equipos de profesionales ha sido reconocida internacionalmente como una estrategia contribuyente a la mejora de la seguridad clínica que debe ser acometida por todos los prestadores de servicios sanitarios. Así, la formación sobre la seguridad vinculada a la asistencia sanitaria es un proceso transversal que se impregna en todas las líneas de acción incluidas en el programa corporativo de Osakidetza, constituyéndose como vehículo para: generar y mantener una cultura de seguridad en las organizaciones, implicar a los líderes, adquirir competencias para poder valorar y analizar de forma proactiva los riesgos, motivar para que se informe de los eventos acaecidos, promover su análisis y el aprendizaje a partir de los mismos, y motivar para fomentar la implicación de los pacientes en su propia seguridad clínica. Distintas metodologías formativas están siendo utilizadas para el desarrollo de esta línea de acción: formación presencial o semipresencial, plataformas on-line, etc.

 

DOCUMENTO ÍNTEGRO:

 http://www.osakidetza.euskadi.net/contenidos/informacion/osk_publicaciones/es_publi/adjuntos/publica/SeguridadPacienteEs.pdf