El Gobierno advierte a EH-Bildu de que las ayudas públicas para atraer inversiones a Euskadi están muy tasadas y limitadas por la Unión Europea (Consejo de Gobierno 26-03-2019)

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26 de marzo de 2019

  • Emite criterio desfavorable a su iniciativa porque, además, el Gobierno Vasco está elaborando un Proyecto de Ley en el que se abordarán las principales cuestiones que propone el grupo parlamentario, como el reintegro de las ayudas por causa de deslocalización empresarial

El Consejo de Gobierno ha emitido, hoy, criterio desfavorable a la toma en consideración, por parte de la Cámara Vasca, de la Proposición de Ley, de EH-Bildu, sobre medidas para hacer frente a la deslocalización de empresas.

En primer lugar, el Gobierno Vasco recuerda a EH-Bildu que el Gobierno Vasco está, ya,  elaborando un Proyecto de Ley reguladora del régimen de subvenciones, tal y como consta en el Programa Legislativo de esta XI legislatura. Esta nueva normativa reordenará toda la actividad subvencional del Gobierno Vasco y, en concreto, abordará el reintegro de las ayudas por causa deslocalización empresarial.

En este sentido, el Gobierno Vasco advierte al grupo parlamentario proponente de que en el reglamente europeo, los incentivos públicos para atraer inversiones están ordenados y regulados de tal manera que eviten una inflación de ayudas entre estados y regiones. Hay limitaciones concisas y cualquier superación del marco reglamentario pondría a las empresas vascas en inferioridad de condiciones competitivas con las empresas de su entorno.

Además, hay que tener en cuenta la realidad en la que vivimos: un mundo globalizado en el que, para que las empresas sean competitivas, deben ser innovadoras y adaptarse a un entorno en permanente evolución, con mercados abiertos, logística y tecnologías en constante proceso de innovación y una competencia intensa. Las inversiones cruzadas transfronterizas, los cambios de localización de tareas y propiedad y la utilización de las tecnologías de la información son parte de la globalización a la que las empresas vascas y las regiones, también, deben adaptarse para resultar competitivas. Su actividad solo será sostenible en la medida en la que tengan éxito en este proceso adaptativo.