Un informe plantea los principales retos y tendencias que enfrentan las personas mayores, entre los 55 años y los 75 años, como forma de realizar una aproximación al perfil vital de las personas mayores de 55 años y saber cómo viven, qué consumen y cómo se sienten.

La elaboración de este informe responde en parte a los resultados obtenidos tras la realización de una encuesta llevada a cabo por la consultora Silver Economy Group en España y Portugal, con una muestra de 249 personas, a los que se añade el análisis de información de fuentes primarias y secundarias.

El informe se estructura en tres grandes apartados:

1. Una primera parte se orienta a la caracterización de las personas mayores, específicamente entre los 55 y los 75 años, de interés para perfilar las tendencias sociodemográficas que pueden afectar y avanzar el comportamiento de estos/as en los próximos años. Entre los aspectos señalados destacan que:

• Se asiste a la convivencia de cuatro generaciones, una de ellas potencialmente longeva, por vez primera a lo largo de la historia.
• De acuerdo con las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística, en 2040 se estima que el 40% de la población superará los 55 años de edad, en una progresión al alza iniciada aproximadamente en 2010.
• El análisis de los datos de la Encuesta de condiciones de vida (INE) muestran que los grupos etarios formados por personas mayores de 50 a 64 años y mayores de 65 años disfrutan de la renta media más elevada del conjunto de la población.
• Los programas de envejecimiento activo y saludable (Década de Envejecimiento Saludable de la OMS, y la iniciativa de Ciudades y Comunidades Amigables con las Personas Mayores) contribuyen a un cambio social y cultural positivo sobre la percepción de la vejez.
• La posibilidad de aprovechar el talento de las personas mayores plantea la oportunidad de diseñar y gestionar programas del talento en el ámbito empresarial.
• Comienzan a desarrollarse iniciativas enmarcadas en el sector emergente de la economía plateada y en paralelo, los mayores de 55 años y las soluciones que demanda el proceso de envejecimiento adquieren peso en la agenda política.
• El discurso de las personas entre 55 y 75 años enfatiza aspectos como la importancia de la autonomía personal para la toma de decisiones y la reivindicación de sus derechos de ciudadanía.
• Según los datos de la encuesta, pocas de estas personas se identifican con el término viejo o anciano. Los varones lo hacen mayoritariamente con el término maduro (78%) y sénior (72%), mientras que las mujeres se identifican con el calificativo sénior en menor porcentaje (52%) que con al calificativo de maduras (76%).
• Se detecta una preocupación importante por la soledad como problema social 74%) y son mayoría quienes consideran que su localidad es amigable con las personas mayores (62%).
• El bienestar emocional es un aspecto de preocupación tanto para hombres como para mujeres (84%), en igual medida que la preocupación que manifiestan por su estado físico. Una amplia mayoría, tanto de hombres (81%) como de mujeres (86%) se consideran personas activas. De hecho, más de la mitad de los varones consideran que realiza suficiente ejercicio físico (57%) frente al 61% de mujeres que afirman realizarlo.
• En lo que se refiere a la dieta, las mujeres confirman mantener una dieta saludable en el 82% de los casos mientras que en el caso de los varones es del 64%.
• A la hora de imaginar su futuro, el 33% de las personas encuestadas se plantea realizar una reforma en casa (cocina y baño), Son más los hombres que se ven residiendo en un centro residencial (24%) frente al 19% de las mujeres. En cuanto a la convivencia, el 39% de los hombres se imaginan viviendo solos frente al 53% de las mujeres.
• Respecto a los aspectos más valorados en las prácticas de consumo destacan por orden la calidad del producto o servicio (75%), seguidos de la atención al cliente (47/%) y el precio (29%). Los hábitos refieren compras en comercios de proximidad (80%), a las que siguen adquisiciones en centros comerciales (63%) e internet (55%).
• Sobre el empleo de medios tecnológicos para la resolución de gestiones, un 57% valora positivamente la atención presencial con cita previa (74%). El 67% de las personas encuestadas emplea internet de forma habitual y se consideran suficientemente actualizados/as en cuanto a las nuevas tecnologías, siendo más elevada dicha actualización en el caso de los hombres (74%). En esta línea, resulta de interés conocer que ambos sexos recurren a familiares y amigas/os cuando necesitan ayuda tecnológica (70%), siendo mayor en el caso de las mujeres (78%). Los hombres presentan una mayor tendencia a recurrir a personas expertas (49%).
• En lo que se refiere a cuestiones sobre el futuro financiero, el 74% actualmente no tiene problemas económicos y tiene planificado su futuro financiero. Tres de cada cinco personas encuestadas en la actualidad completa o prevé completar en el futuro la jubilación con sus ahorros. Resulta significativo que el 14% se plantea donar todo o parte de su legado a una entidad.
• En cuanto a la posibilidad de retrasar la edad de jubilación y continuar laboralmente activos/as, las mujeres están menos predispuestas a trabajar más allá de la jubilación (38%).

2. Retos para empresas. Una segunda parte del documento identifica los aspectos que son necesarios atender y destaca las oportunidades que representan para todos los sectores económicos poder ofrecer productos y servicios a las personas mayores de 55 años:

Este informe subraya la necesidad de identificar lo que significa atender y dar respuesta de formas adecuada, y con perspectiva de negocio, a las demandas y requerimientos de un segmento de población tan numeroso y creciente de la población. Las razones para ello se encuentran en su condición de motor para la reactivación económica, ya que en torno a este se genera no solo trabajo y riqueza sino también bienestar para la sociedad en su conjunto.

El documento insiste en la importancia de “adoptar esa nueva mirada de edad”, con iniciativas basadas en la autenticidad que se orienten a las nuevas necesidades de productos y servicios, o a la adaptación de productos y servicios ya existentes mediante la escucha de quienes forman parte de ese segmento de edad.

En este contexto, el informe elabora una relación de desafíos para los diferentes sectores productivos. En materia de salud se identifican los siguientes retos:

• Desarrollar programas de prevención para clientas/es.
• Facilitar servicios para personas empleadas con padres mayores.
• Desarrollar nuevos productos y servicios sencillos y adaptados.
• Investigación específica de la longevidad, considerando rasgos específicos por sexo
• Desarrollo de planes salud ad-hoc: hombres-mujeres.
• Adaptar el canal farmacia y parafarmacia.
• Telemedicina y autogestión control remoto accesible.
• Incorporar la monitorización en el hogar a gestión integrada.
• Oferta de programas integrales de bienestar.
• Promover programas para evitar el deterioro cognitivo.
• Ofertar productos y servicios de salud y movilidad “tutelados”.

En cuestiones de vivienda, los aspectos a los que dar respuesta se enfocan a:

• Ofrecer soluciones integrales para adaptar el domicilio y eliminar las barreras físicas.
• Ofrecer servicios específicos de atención en domicilio: fisioterapia, peluquería, veterinario, recogida de lavandería...
• Desarrollar aplicaciones de sensores para facilitar la seguridad.
• Promover la implantación de soluciones domóticas.
• Implicaciones de la venta online para artículos del hogar.
• Facilitar el cambio de vivienda a una más pequeña o en entornos amigables.
• Ofrecer nuevas fórmulas de vivienda tutelada, coliving, cohousing...
• Desarrollar productos y servicios para vivir más tiempo y de forma más cómoda en el hogar.

En materia de movilidad los desafíos son:

• Diseñar aplicaciones específicas para el colectivo.
• Ofrecer servicios de acompañamiento.
• Adaptar la oferta de vehículos al colectivo.
• Comercializar productos de apoyo para mayor confort en los vehículos.
• Comercializar triciclos para personas adultas.
• Mejorar los productos de apoyo (bastones, muletas, andadores, ...).
• Mejora de las indicaciones y legibilidad de los mensajes.

Por último, en el ámbito tecnológico, los retos que se centran en:

• Incorporar la lectura fácil y experiencia usuario sénior.
• Promover grupos intergeneracionales.
• Formación a medida. Facilitar el uso como canal de comunicación y monitorización.
• Diseño de dispositivos adecuados a las necesidades de manejo físico y cognitivo.
• Creación de productos y adaptación de existentes más eficientes y accesibles.
• Gestión y control remoto de parámetros salud.
• Aplicaciones domóticas específicas.

Entre los desafíos para las empresas este informe destaca la importancia de las capacidades profesionales y la previsión de un considerable déficit de profesionales cualificadas/os en determinados sectores productivos (previsto con el valor negativo de la tasa de reposición de profesionales activos/as en los próximos años). Se plantea así la necesidad de gestionar el talento de las y los profesionales de más edad:

• En muchos puestos de trabajo especializados, es difícil encontrar reemplazo, no porque no haya personas disponibles en el mercado de trabajo, sino porque su cualificación, conocimiento y sobre todo experiencia, no se ajusta a la requerida. En otros casos el reto se presenta cuando muchas de las personas profesionales se jubilan o lo harán al mismo tiempo (como es el caso del personal facultativo) con lo que será difícil cubrir sus plazas y la experiencia acumulada.
• Capturar y retener el conocimiento es una forma de rentabilizar la inversión realizada tanto por la persona como por la empresa.
• Asumir que las plantillas tienen que integrar distintas generaciones, implica motivar a todas las personas trabajadoras, evitando fricciones o falta de compromiso.
• Asegurar que el bienestar físico y emocional se mantiene en todas las etapas de la vida laboral para garantizar la salud, el rendimiento y evitar bajas.
• Preparar para el reemplazo y la jubilación, con acciones específicas que contemplen una actuación integral.
• Ajustar los espacios de trabajo y las responsabilidades a la evolución de la persona, facilitando la diversidad e inclusión por edad.
• Desarrollar programas de prevención para empleados.
• Responder a nuevas necesidades de conciliación laboral, ya que no solo hay que cuidar a › hijo/as, sino también a madres, padres o cónyuges.

3. Retos para instituciones

La necesidad de dar respuesta en presente y a futuro a un segmento de población numeroso y longevo plantea a las instituciones públicas -en los diferentes niveles de administración- desafíos relacionados con la atención y cuidado de las personas mayores dependientes (labor fundamentalmente asistencial), pero también en lo que se refiere a la promoción del envejecimiento saludable y de la vida activa entre las personas mayores, con el desarrollo de entorno físicos y digitales amigables que atienda, además, a la heterogeneidad y diversidad funcional del colectivo de personas mayores.

Entre los desafíos identificados para las instituciones públicas se encuentran las actuaciones orientadas a la prevención y detección precoz de situaciones de la soledad no deseada -que tiene, además, un fuerte componente de género- con la puesta en marcha de iniciativas multisectoriales, de proximidad y con participación del voluntariado social.

La economía plateada, también llamada silver economy, es la actividad económica generada por la oportunidad que comporta el consumo de productos y servicios por parte de las personas mayores. Como actividad económica resultante de un cambio demográfico vinculado al envejecimiento de la población y a su longevidad, favorece la innovación y creación de riqueza en un proceso que afecta tanto al sector público como al privado y que incluye a todos los ámbitos económicos.

Si desea ampliar esta información, puede consultar el informe: “Los Se?nior. Tendencias y retos para empresas e instituciones” (2022), elaborada por Silver Economy Group

Silver Economy Group es una empresa de consultoría que ofrece servicios a empresas e instituciones a fin de trabajar en el reto que supone el envejecimiento demográfico. Es entidad fundadora de la Asociación Española de la Silver Economy (AEDESE), la organización que reúne y representa a las personas y entidades públicas y privadas con el objetivo identificar y satisfacer cualquier necesidad generada entre la población mayor para contribuir a incrementar su salud, bienestar y calidad de vida.