Departamento de Salud / Igualdad, Justicia y Políticas Sociales

Estrategias de atención domiciliaria para personas mayores dependientes: influencia de los factores contextuales

Fecha de publicación: 

Equipo de Coordinación Sociosanitaria de Euskadi.

Imagen de archivo. Tercera edad / SAD

Imagen de archivo. Tercera edad / SAD

La revista Aging & Society (Cambridge Press, 2021) publica un artículo que analiza las estrategias de cuidados en relación con diversos factores que las determinan para conocer el uso de los servicios públicos por parte de los diversos segmentos de la población mayor en barrios de diferente nivel socioeconómico en Barcelona.

Objeto

Sus autores, Albert Julià (Institut d’Estudis Regionals i Metropolitans de Barcelona (abre en nueva ventana), IERMB y Universitat de Barcelona), Sandra Escapa (Universitat de Barcelona)  y Pedro Gallo (Universitat de Barcelona) presentan los resultados de un estudio desarrollado con una muestra de 530 personas mayores de 55 años que residen en dos barrios con diferente nivel socioeconómico de Barcelona con el objetivo  de identificar y analizar las diferencias en el tipo de cuidado elegido por las personas dependientes y sus familias en Barcelona y determinar si los contextos urbanos (barrios) están vinculados al recurso del cuidado familiar, de amigos/as y/o vecinos/as (informal), los servicios públicos o el cuidado privado en el hogar (que puede ser contratado formal o informalmente).

Partiendo de la premisa de que la gran variabilidad de necesidades que presentan las personas mayores dependientes en función de su grado y el tipo de dependencia, los autores del estudio defienden que 'la elección de la opción asistencial en la edad adulta es un fenómeno social complejo y dinámico en el que influyen factores muy diversos'. De hecho, dicha elección puede decantarse por una de las opciones o una combinación de estas, en función de las características de las redes de apoyo. Sin embargo, según los autores, dicha elección puede estar influida por factores como la edad, el sexo, la etnia, los recursos a su disposición o el número de personas con las que conviven. Por ello, el estudio examina la relevancia de las características individuales y del contexto en tales decisiones, es decir, el nivel de servicios y políticas públicas con las que cuenta la persona en su entorno.

 

Características de la muestra

El grupo de muestra de personas mayores (55 años o más) estaba compuesta por un 36,8% de personas usuarias de SAD en los barrios de bajos ingresos (en comparación con el 19,2% en los barrios de altos ingresos) y el 28,9% que reciben una prestación económica en los barrios de bajos ingresos (en comparación con el 15,1% en los barrios de altos ingresos). De las personas de la muestra, el 42,2% tenía un grado de dependencia I, el 33,1% el grado II, el 12% el grado III y el 12,7% no tenían asignado un grado de dependencia y se encontraban a la espera de ser evaluados por las autoridades públicas y que, no obstante, ya tenían derecho al SAD o a una prestación económica.

 

Revisión de la literatura

La revisión de la literatura realizada pone de manifiesto algunas de las conclusiones obtenidas por investigaciones realizadas en el entorno europeo y que concluyen que las sociedades con una provisión de bienestar basadas en derechos individuales tienden a empoderar a las personas mayores y a ofrecer más opciones de atención que las sociedades con un sistema basado en la solidaridad familiar y el cuidado informal, en las que el comportamiento de las personas mayores y sus familias está más alineado con los valores tradicionales del cuidado (que prioriza el apoyo mutuo entre cónyuges y descendientes). Asimismo, las diferencias entre el cuidado que puede brindar un servicio público y el que puede ofrecer una familia, hace que la opción del cuidado familiar resulte más atractiva para las personas mayores y sus familias.

Asimismo, si se tienen en cuenta aspectos del urbanismo (características físicas, diseño urbano y o comunicaciones, por ejemplo) de los espacios de vida (distritos, vecindarios o pequeñas comunidades) la literatura científica evidencia que pueden detectarse diferencias territoriales significativas entre dichos espacios (urbano versus rural, entre áreas urbanas) y que algunos autores/as atribuyen a las desigualdades de ingresos, otros/as al perfil de las personas usuarias o de los/las habitantes de un área geográfica determinada (características étnicas, socioeconómicas, etc.), por citar a algunos de ellos. La conclusión es que el elemento común a todos los estudios revisados por los autores es la constatación de diferencias significativas en las estrategias de atención según el lugar donde viva una persona y que existen factores externos que determinan la toma de decisiones, el comportamiento y las estrategias de las personas en relación con los servicios públicos de apoyo.

 

Principales conclusiones

Las conclusiones de este artículo subrayan la importancia no solo de las características de las propias personas dependientes o de la red de atención, sino de los factores contextuales (preferencias personales definidas por procesos de socialización, por ejemplo) a la hora de perfilar las diferentes estrategias de atención por las que se opta para el cuidado y atención de las personas mayores dependientes.

Considerar el tipo de barrio y sus características para explicar las estrategias de atención a las personas mayores plantea un enfoque que trasciende el examen de los aspectos individuales per se (ingresos, número de personas en el hogar, edad, sexo o grado de dependencia) e incorpora al análisis del peso de las desigualdades territoriales y socioeconómicas que, según los autores, reproducen en una misma ciudad las desigualdades en el tipo de cuidado utilizado. Los resultados del análisis realizado sugieren que las personas mayores en situación de dependencia en barrios de altos ingresos tienen más probabilidades de recibir atención formal remunerada en el hogar y menos probabilidades de recibir atención de familiares o servicios públicos de atención domiciliaria (SAD). Estas diferencias indican que las personas dependientes en barrios de altos ingresos encuentran una gama más amplia de estrategias de cuidado disponibles que permite una mayor flexibilidad en la organización del cuidado de acuerdo con sus necesidades, y una menor carga para su familia, parientes y amigos/as como cuidadores/as.

Sin embargo, dadas las mismas condiciones económicas del hogar (es decir, nivel de ingresos), las personas mayores dependientes que viven en barrios de altos ingresos se sienten menos atraídas por el uso de los servicios sociales municipales que las personas con los mismos perfiles socioeconómicos y de convivencia que viven en barrios de bajos ingresos.

Según los autores, una posible explicación podría deberse a la percepción de ciertas barreras para acceder a los servicios de atención pública en los barrios más acomodados, vinculadas por ejemplo a la estigmatización asociada al uso de los servicios sociales municipales y la percepción de la calidad de estos servicios, que incentivaría el uso de otras formas de cuidado.

Por último, los autores defienden que los servicios públicos de atención a las personas mayores no deben centrarse en exclusiva en las características individuales de las personas dependiente sino valorar también las características de las comunidades y los vecindarios para mejorar la eficacia de estos servicios puesto que las diferencias en los contextos socioeconómicos urbanos determinan algunas desigualdades en el uso de dichos servicios, incluso después de someter a control las diferencias socioeconómicas individuales.

Si desea ampliar esta información, puede consultar el artículo 'Influencia del perfil socioeconómico de los barrios en la selección de estrategias de atención domiciliaria para personas mayores dependientes'  (abre en nueva ventana)(Influence of socio-economic profile of neighbourhoods on the selection of home care strategies for old er dependants) publicado por la revista Ageing & Society (abre en nueva ventana) (2021).