Departamento de Salud

La nueva Estrategia de Seguridad del Paciente busca la participación de profesionales y pacientes para generalizar las mejores prácticas en todos los ámbitos asistenciales

9 de mayo de 2018

Incorpora seis nuevas líneas de acción para seguir avanzando hacia la máxima reducción posible de riesgos para las personas

Garantizar la continuidad del conjunto de líneas de acción y de proyectos implantados, incorporando el aprendizaje logrado en estos últimos años y asumiendo nuevos retos es el objetivo que persigue la nueva Estrategia de Seguridad del Paciente 2017-2020. Así lo ha explicado hoy el consejero de Salud del Gobierno Vasco, Jon Darpón, que ha comparecido en la Comisión de Salud del Parlamento Vasco para informar del contenido de este documento estratégico.   

Según ha destacado, la principal característica diferencial de la nueva Estrategia de Seguridad, que pretende ahondar en los logros obtenidos por la anterior, es “la búsqueda permanente de la participación de nuestros y nuestras profesionales y también paulatinamente de los y las pacientes”. Para ello, cada proyecto se sustenta en un grupo de trabajo corporativo conformado con la representación de miembros de todas las OSI, y de las diferentes categorías profesionales involucradas en cada proyecto.

Asimismo, cada una de las líneas de acción persigue como objetivo la generalización corporativa de las mejores prácticas en materia de seguridad en todos los ámbitos asistenciales (atención primaria, hospitalaria, salud mental, emergencias…), y contando con todos los y las profesionales implicados.

Fruto del aprendizaje logrado en estos últimos años, se incorpora una serie de innovaciones de calado:  

Gestión de los incidentes de Seguridad

El desarrollo, tanto cuantitativo como cualitativo, del sistema de notificación y aprendizaje en Seguridad del Paciente se va a enmarcar en un abordaje integral de la gestión de los incidentes de Seguridad para garantizar el análisis del mayor porcentaje posible y el aprendizaje a partir de la notificación no solo de los incidentes de Seguridad sin daño para el paciente, sino también a partir de los que sí lo ocasionan (los denominados eventos adversos).

Atención a las segundas y terceras víctimas

En el mismo terreno de los incidentes de seguridad, resulta esencial el seguimiento de estrictas recomendaciones orientadas a la atención, no sólo de las y los pacientes afectados -que, obviamente, son nuestra principal prioridad-,  sino también de las y los profesionales implicados (segundas víctimas) así como de las organizaciones en las que se producen (terceras víctimas).

Seguridad del paciente en los Servicios de Urgencias

Los servicios de Urgencias constituyen un ámbito específico en el que la probabilidad de incidentes de Seguridad es mayor. De ahí que se vaya a abordar esta problemática con un enfoque corporativo, siempre con la vista puesta en reforzar el nivel de Seguridad de las personas que son atendidas en estas unidades.

Buenas prácticas en los pacientes hospitalizados en riesgo de desnutrición

Como sabrán, hay determinados grupos de pacientes que por diferentes factores, que van desde la edad a determinadas patologías asociadas, son especialmente vulnerables ante un   riesgo potencial de desnutrición. En Osakidetza, existen experiencias pioneras para prevenir este peligro. Nuestra intención ahora es generalizar esos proyectos alcanzando al conjunto de las personas hospitalizadas en Euskadi.

Buenas prácticas para la prevención de la incontinencia urinaria

El objetivo de esta línea es facilitar una adecuada valoración de la situación funcional de los pacientes, así como de las ayudas que pudieran precisar para orinar en el momento del ingreso. Con este punto de partida, se trataría  de evitar la incontinencia derivada del uso inadecuado de absorbentes durante la hospitalización.

Plan de acción frente a las resistencias a los antibióticos

Para esta nueva etapa, se plantea también la generalización de los Programas de Optimización en la Prescripción de Antibióticos (PROA), orientados a prescribir aquellos antibióticos estrictamente necesarios, evitando tratamientos superfluos e intentando seleccionar el más adecuado en cada caso.

Unos proyectos cuya materialización depende, tal y como ha recalcado el consejero de Salud, de “nuestra capacidad de seguir promoviendo y extendiendo la cultura de Seguridad, mediante iniciativas en el terreno de la formación”. Así, se van a redoblar los esfuerzos para extender al mayor número de profesionales el curso básico on-line que ya ha realizado cerca de la mitad de la plantilla de Osakidetza; además de promover cursos específicos relativos a cada proyecto. Y es que, según subrayaba, esta ambiciosa estrategia no podría desplegarse sin la colaboración e implicación activa de nuestros y nuestras profesionales, “los mismos que han convertido la anterior estrategia en exitosa y eficaz, y ahora lograrán con su esfuerzo seguir avanzando en la mejora continua y la reducción de riesgo de incidentes”.