El Lehendakari Patxi López ha presidido esta tarde la entrega de los Premios Korta, que este año han cumplido su décima edición. El acto celebrado en Lehendakaritza ante una amplia representación del empresariado, las instituciones y la sociedad vasca ha premiado la trayectoria de seis empresarios. 

Los galardonados de este año son Pedro José Ruiz de Apodaka, Félix Quintana (ambos a propuesta de SEA-Empresarios Alaveses), los guipuzcoanos Jaime Caballero y José María Echarri (apadrinados por Adegi) y los vizcaínos Juan José Aurtenetxea y Amancio Grijelmo (propuestos por Cebek).

En todos ellos, el jurado ha destacado su implicación en los sectores empresariales en los que han desarrollado su actividad profesional, así como su relevancia en el desarrollo de los valores empresariales, creación de empresas, generación de nuevas actividades y puestos de trabajo, así como su aportación personal, en cada caso, en algunos de los campos de la innovación, la producción, la construcción, las estructuras metálicas, las artes gráficas o suministros industriales.

Pedro José Ruiz de Apodaka

Nació hace 64 años en Vitoria-Gasteiz y, tras realizar sus estudios de Bachillerato en el colegio Marianistas, se trasladó a Madrid para completar su formación académica. En 1968, regresó para su primera toma de contacto en el mundo laboral en la empresa propiedad de su padre, Construcciones Hilario Ruiz de Apodaca, dedicada a la promoción y construcción de viviendas.

En 1976, la familia creó Aldape S.A. Durante estos 40 años de dedicación exclusiva a la construcción, Pedro José ha participado en la construcción de más de 1.600 viviendas en Vitoria durante las tres generaciones de la saga Ruiz de Apodaka que han formado y forman Aldape.

Como buen innovador, el empresario alavés ha buscado las nuevas tendencias. Prueba de ello fue su temprana adopción del protocolo familiar y la adecuación a las distintas certificaciones. Entre los valores que ha transmitido a su plantilla destacan la seriedad por el trabajo bien hecho, el compromiso en cumplir los plazos y el cariño a cada obra levantada por la empresa. Y todo, con la máxima de “no permitir  la ceguera de una ambición excesiva”. Dos de sus hijas desarrollan su labor profesional en Aldape.

Félix Quintana

Nació hace 72 años en Vitoria-Gasteiz y, tras adquirir conocimientos de náutica y realizar estudios administrativos, comenzó su trayectoria profesional en Éibar, en empresas como Forjas Macharia y Felipe Tellería, donde terminó desempeñando cargos de responsabilidad. Un año después decidió dar un giro en su vida al incorporarse como gerente de Helmus Electrónica, hasta que cambió de sector y tomó las riendas como director comercial de Acerías y Forjas de Azkoitia. 

Tras adquirir una amplia experiencia en distintos sectores, en 1973 se incorporó como socio a una empresa a la que durante años había visitado asiduamente: Tauxme, ubicada en Nanclares y dedicada a la fabricación de estructuras metálicas. Esta compañía la habían fundado en 1965 sus dos hermanos gemelos. Con ellos compartió la gestión hasta 1992, cuando tomó las riendas en solitario. 

No fueron tiempos fáciles, pero en la actualidad Tauxme está presente en cuatro continentes y cuenta con cerca de 100 empleados. Desde esta empresa vitoriana se han ejecutado obras de  envergadura como la segunda mina de cobre mayor del mundo en Cananea (México), numerosas acerías por todo el mundo como las primeras implantadas en Marruecos y en Argelia, y el nuevo edificio de la Caja Vital. 

La apuesta de Félix Quintana es aplicar a todos los niveles una “política de respeto; el que entra a trabajar en Tauxme, se jubila”, presume el empresario. 

Jaime Caballero

Nacido en Tolosa hace 67 años en una familia que lleva cuatro generaciones en la industria papelera, estudió el bachillerato en el Colegio de los Jesuítas de Tudela y realizó estudios de Derecho en la Universidad de Valladolid. 

Comenzó a trabajar en el Departamento de Administración de Papelera del Oria S.A.. Ocupó los cargos de apoderado primero y gerente después, en un tiempo en que la empresa atravesaba una delicada situación, recién salida de una suspensión de pagos y con la obligación de cumplimiento de un convenio con sus acreedores.

Jaime Caballero fue además víctima de un secuentro que duró 59 días, desde el 10 de diciembre de 1986 al 7 de febrero de 1987.  

Tras 24 años en la gerencia de Papelera del Oria, se jubiló el 31 de diciembre del año pasado, con la empresa totalmente consolidada. Hoy su hijo continúa su legado.

José María Echarri

Nació hace 75 años en Donostia-San Sebastián. Profesor Mercantil por la Escuela de Comercio de San Sebastián y economista por la Escuela de Altos Estudios Mercantiles de Bilbao, José María Echarri ha tenido una amplia trayectoria profesional. Comenzó en 1953 en la Delegación de Mutualidades Laborales para pasar más tarde a una empresa de moldeado, Letaman. 

Durante 20 años perteneció a la multinacional familiar de origen noruego O. Mustad y Cía. Del sector de la tortillería y maquinaria cambió al de revestimientos textiles de PVC y accesorios, en Sommer Allibert España, entre 1982 y 92. Allí alcanzó al cargo de vicepresidente y consejero delegado de varias empresas del grupo. 

José María Echarri desempeñó su siguiente etapa dentro del sector del cemento, hormigón y áridos, en la Sociedad Financiera y Minera S.A., matriz de Cementos Rezola. Asumió los cargos de presidente y consejero delegado. Su trayectoria profesional la continuó como director gerente de Pakea, Mutua de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales de la Seguridad Social.

La actividad de Echarri ha sido incesante y muy diversa: presidente del Orfeón Donostiarra, cónsul de Noruega en San Sebastián, presidente del Patronato de la Fundación Inasmet y presidente de la Corporación Tecnalia, además de vicepresidente de Mutualia. También llegó a ser presidente del Guipuzcoano y de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Gipuzkoa durante dos legislaturas, 2002-2006 y 2006-2010. 

Juan José Aurtenetxea

Nacido en Bilbao hace 71 años, estudió en el colegio Santiago Apóstol y realizó estudios superiores de Perito Mercantil en la Escuela de Comercio de Bilbao. A los 18 años, inició su trabajo en Central de Maquinaria & Herramientas, almacén muy acreditado donde adquirió experiencia en el conocimiento de las máquinas, herramientas, accesorios y útiles industriales.

No obstante, siempre tuvo deseos de formar su propia empresa. A la par que trabajaba en la empresa, desarrolló un proyecto que cristalizó en una patente para la industria naval y fundó la compañía Electro-Navales R.Y.A, que se dedicaba a la fabricación y venta de material eléctrico estanco para buques. Pero fue en 1963 cuando acometió su gran proyecto vital.

Constituyó Suministros Aurtenetxea, dedicada al suministro integral de maquinaria, herramientas, accesorios, útiles, etc. para la industria en general, automoción, construcción civil y obras públicas. Disponía de una ferretería industrial con almacenes y oficinas, mientras que en la calle contigua se situaba la ferretería de venta al público.

Sufrió en 1983 las inundaciones, que le obligaron a trasladarse a otra dirección, la calle Begoñalde de Bilbao, donde vivió dos etapas: Una primera de nuevo crecimiento y la otra con la llegada de la crisis en los primeros años 90. En este periodo decidió trasladar la empresa a un pabellón industrial de Sondika. Aurtenetxea sorteó la crisis y se colocó en primera posición para embarcarse en una etapa de modernización.

La empresa se ha situado como la más importante de suministros industriales y de construcción de Vizcaya. Fue la primera del sector en obtener la norma ISO 9001 de calidad, y también ha sido la primera en simultanearla con otros certificados de Medio Ambiente y prevención de riesgos laborales.

El empresario fundó además en 1986 Aurtenetxea Containers, S.A, situada en la Campa de Erandio y dedicada al alquiler y venta de contenedores marítimos. Asimismo, fundó Sendeja, S.A. para la gestión de inmuebles de uso propio y de empresas ajenas al grupo.

Amancio Grijelmo

Nació en Bilbao hace 82 años. Estudió en el colegio Santiago Apóstol. Es intendente mercantil por la Escuela de Altos Estudios Mercantiles de Bilbao, y completó su formación académica con prácticas y estudios en artes gráficas en Madrid, Barcelona, París y Freiburg (Alemania). 

Cumpliendo con la tradición, en 1952 comenzó a trabajar en la empresa familiar Artes Gráficas Grijelmo. La empresa se había fundado en 1890 por su abuelo Federico Grijelmo, que editó diversas publicaciones bilbaínas importantes. Su incorporación y la de sus hermanos constituyó la tercera generación de la familia. 

Con los años, asumió distintas direcciones en la imprenta. Artes Gráficas Grijelmo llegó a ser la mayor empresa de Artes Gráficas de Euskadi y una de las mayores de España, al superar los 500 empleados.

Grijelmo es presidente de honor de la Asociación de Artes Gráficas de Vizcaya, a la que pertenece desde hace 54 años. Llegó a ser vicepresidente de la Federación Nacional de Artes Gráficas. También ha participado en la creación de empresas vinculadas con las artes gráficas. La familia Grijelmo fundó Tintas Prisma, y contribuyó a la creación de Disma, el mayor almacén de papel de todo Euskadi. 

También intervino en la fundación de editoriales, entre las que figuran Ediciones Deusto, Durvan, Urmo, Neguri, Cantabria e IBC. En la fotomecánica fundó Didot y las dos empresas en la que desarrolla actualmente su labor profesional, siempre que su salud se lo permite, Datacolor y Computer to Plate. Hasta el año pasado y con 81 años, Amancio ha acudido diariamente a sus empresas.

Vitoria-Gasteiz, 30 de junio de 2010