El paro sube en octubre en 64 personas y los indefinidos suponen el 30,4% del total de nuevos contratos firmados

3 de noviembre de 2022

Las importantes amenazas para la evolución económica siguen sin tener su reflejo en la evolución en el empleo. Octubre se cerró en Lanbide con 111.744 personas que solicitaban empleo y no lo encontraban. Son 64 más que el mes anterior, pero en unas cifras que prácticamente no varían.

Si se comparara con la buena evolución del conjunto del año podría parecer que se ha producido un frenazo en la creación de empleo, pero si se observa lo que ha ocurrido en las dos últimas décadas es que ha habido más ocasiones en las que en este mes el paro ha subido o se ha estancado y en otros ha bajado. Por tanto, no extraemos de aquí ninguna conclusión que pueda conectar las dificultades económicas que existan con un parón en el empleo.

La variación ha sido tan pequeña con respecto al mes anterior que tampoco permite extraer reflexiones por cuestiones sectoriales ni territoriales, aunque el aumento se centra en Bizkaia mientras que en Gipuzkoa y Álava desciende.  Por sectores, hay un aumento en el primario, por el fin de determinadas actividades intensivas en esta área que se producen en septiembre y octubre, mientras que desciende en construcción y de forma especialmente significativa en Educación.

También, por señalar algún detalle,

  • el paro aumenta entre los hombres y disminuye entre las mujeres
  • la franja de edad con mejor comportamiento ha sido entre los 25 y los 45 años
  • y el desempleo se recorta en el paro de larga duración mientras aumenta en el de corta duración.

Otro dato relevante, que afecta directamente a la estabilidad y, por tanto, a la calidad en el empleo, es que el 30,4% de los nuevos contratos han sido indefinidos, consolidando la apuesta que se abrió con la última reforma laboral.

En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, siempre sube en este mes. Pero en esta ocasión lo ha hecho con tal fuerza que le convierte no sólo en el mes de octubre con mayor número de personas afiliadas, sino que vuelve a superar los máximos históricos que ya se habían alcanzado este mismo año.

En esta visión completa, una de las cuestiones que han fijado la atención en las últimas semanas han sido las previsiones de que pudieran aumentar los Expedientes de Regulación de Empleo por efecto de las dificultades que se encuentran las empresas. Sin embargo, a día de hoy el número de empresas que han solicitado poder contar con esta herramienta de protección de empleo y de personas a las que se les podría aplicar se mantiene en la misma línea desde el brusco descenso que se produjo con la entrada en vigor de la reforma laboral. A cierre de octubre en Lanbide constaban 842 personas trabajadoras que realmente estaban en ERTE, la sexta parte de quienes estaban en esta situación a principios de año y una décima parte con respecto a octubre de 2021.

En cuanto a la Renta de Garantía de Ingresos, hay un leve incremento de titulares, 38 personas más que en septiembre, pero se aprecia una estabilización en torno a las 49.000 personas tras cinco meses consecutivos por debajo de las 50.000. Algo similar ocurre con el Ingreso Mínimo Vital, que crece en 124 hasta los 19.872 titulares, de los cuales la mitad completan sus ingresos con RGI y la otra mitad tienen sólo la nueva prestación.

Por tanto, en octubre de nuevo se repite el patrón de un tejido productivo sólido que resiste a todas las amenazas y dificultades que se han presentado este año, que no sólo no destruye empleo, sino que consigue seguir creándolo, como se ve con cifras jamás vistas en afiliación de la Seguridad Social en Euskadi.