Un equipo de Aranzadi, impulsado por Gogora y el Ayuntamiento de Bilbao, inicia los trabajos para recuperar los restos de 60 víctimas de la Guerra Civil inhumadas en el cementerio bilbaíno de Begoña

4 de diciembre de 2021

  • Los trabajos se han iniciado hoy, con presencia de familiares, en la primera de las zonas del cementerio donde se tiene constancia de inhumaciones de víctimas
  • Este proyecto de exhumación se lleva a cabo en el marco del convenio que el Gobierno Vasco y Aranzadi mantienen para la recuperación de personas desaparecidas en la Guerra Civil
  • Esta intervención en el cementerio de Begoña es, a su vez, parte de un proyecto más amplio del Ayuntamiento de Bilbao de recuperación de la zona.

Bilbao, 04/12/2021

Un equipo arqueológico de la Sociedad Aranzadi, bajo el paraguas del Instituto de la Memoria Gogora y del Ayuntamiento de Bilbao, ha iniciado hoy los trabajos para recuperar los restos de las víctimas mortales de la Guerra Civil inhumadas en el Cementerio de Begoña, de Bilbao. Este cementerio está clausurado desde el 2003 y, en la actualidad, el Ayuntamiento de Bilbao está procediendo a la exhumación de todos los restos con el fin de convertir este espacio en un parque público, en el marco del proyecto denominado Begoñako Argia. En este primer momento, se han iniciado los trabajos en una de las dos zonas o áreas en el que, según la documentación disponible, existen enterramientos de víctimas de la Guerra Civil.

Esta mañana han acudido al inicio de estas tareas Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, y Juan Mari Aburto alcalde de Bilbao, junto con familiares de víctimas que, según la documentación disponible, pueden estar inhumadas en ese lugar. Les han acompañado José Antonio Rodríguez Ranz, viceconsejero de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación; Aintzane Ezenarro, directora del Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos Gogora; Asier Abaunza, concejal de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos del Ayuntamiento de Bilbao; y Paco Etxeberria y Lourdes Herrasti, integrantes de la Sociedad de Ciencias Aranzadi.

La consejera Beatriz Artolazabal ha reafirmado el compromiso del Gobierno Vasco para tratar de recuperar el mayor número de personas desaparecidas durante la Guerra Civil. “Seguiremos intentado esclarecer la verdad para que todas las familias puedan cerrar su duelo definitivamente”, ha afirmado.

Hoy han estado presentes en el cementerio de Begoña, varias personas con familiares que, según la documentación disponible, podrían estar en enterramientos de este lugar, aunque, en algunos casos, se desconoce el emplazamiento exacto.

Especialmente emotiva ha sido la presencia de una octogenaria, acompañada de su nieto, tras conocer esta semana por boca de responsables de Gogora que su padre falleció en la batalla de Artxanda el 14 de junio de 1937, apenas unos días antes de la caída de Bilbao, y que su enterramiento se habría realizado en Begoña, según consta en documentación histórica del Registro Civil de Sopuerta, aunque su nombre no aparece en los libros de este cementerio.

En base a la investigación sobre víctimas mortales de la Guerra Civil en el periodo 1936-1945, impulsada por Gogora, en ese emplazamiento, se encuentran inhumados los restos de 60 personas, víctimas civiles y combatientes. Entre ellos hay casos de víctimas cuyas familias desconocen el lugar y la fecha de sus fallecimientos, es por lo que la consejera Artolazabal ha hecho un llamamiento para que las familias que desconozcan el paradero de sus allegados fallecidos en la guerra se pongan en contacto con Gogora.

La máxima responsable en Euskadi de las políticas públicas de memoria histórica ha animado a otras familias que crean tener víctimas de la Guerra enterradas en este cementerio a ponerse en contacto con Gogora.

El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, se ha referido al proyecto Begoñako Argia, desarrollado por la Sociedad de Ciencias Aranzadi y financiado por el Ayuntamiento de Bilbao; un proyecto que abarca desde la investigación y divulgación hasta la formación científica en materia de memoria histórica desde el simbólico enclave de Begoña, “el mejor escenario posible para albergar un proyecto de ciencia y conocimiento”.

El alcalde ha agradecido “el minucioso y siempre respetuoso trabajo” que Aranzadi está desarrollando en el proceso de exhumación, y al Gobierno vasco y a Gogora, “por una labor imprescindible para la reparación y memoria de quienes lucharon por la democracia, porque la luz de su recuerdo, siempre permanecerá encendida”.

El cementerio de Begoña, clausurado en 2006, estuvo en funcionamiento entre 1813 y 2003 (fecha de la última inhumación) y, además de su valor en materia de Memoria Histórica, alberga un conjunto de gran interés para el estudio de la arquitectura funeraria de finales del siglo XIX y del siglo XX.

Tanto la consejera Artolazabal como el alcalde de Bilbao han hecho referencia a la colaboración interinstitucional que hace posible este proyecto; colaboración entre el Gobierno Vasco y el Ayuntamiento de Bilbao, y la cooperación público-social gracias al convenio entre Gogora y la Sociedad de Ciencias Aranzadi.

60 víctimas mortales de la Guerra Civil 

La documentación extraída de los Registros Civiles, libros parroquiales, y los registros del propio cementerio, volcada y puesta a disposición pública a través de la base de datos de víctimas mortales de la Guerra Civil, en el periodo 1936-1945, apunta a que son 60 las personas víctimas de la guerra inhumadas en el cementerio de Begoña.

Según esta investigación, se encontrarían combatientes (gudaris y milicianos) y también víctimas civiles, muertas en bombardeos, concretamente, se conoce que algunas personas fallecidas en el bombardeo a la fábrica-refugio de Cotorruelo, el 18 de abril de 1937, fueron inhumadas en ese cementerio.