La Vicelehendakari y Consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendía, ha inaugurado esta mañana el 11º Curso de Verano de Osalan que, en esta edición, versa sobre “Diversidad y prevención de riesgos laborales”, tema elegido desde la constatación de que cada sociedad tiene un mapa dinámico de diversidad que se manifiesta en ámbitos como el biológico, el funcional, el cultural, el educativo, el lingüístico, el genético, el étnico, el sexual, el de género, el religioso o el de pensamiento, entre otros, y que resulta por ello fundamental llevar a cabo una adecuada gestión de la diversidad en el entorno laboral, adaptando la prevención de riesgos laborales a la realidad de cada uno de ellos.
En su intervención, la Vicelehendakari ha subrayado que, de hecho, esta idea ha estado en la base de prácticamente todos los Cursos de Verano que ha venido organizando Osalan en los últimos años. Por poner algunos ejemplos, Mendía ha recordado que, en el Curso de 2019, se trató el tema de la edad y cómo a medida que envejecemos y la manera en que lo hacemos se plantea la necesidad de diseñar y poner en marcha nuevas soluciones que den respuesta a las necesidades cambiantes que van surgiendo. Se trataba de plantear cómo afrontar el hecho de que. hoy en día, por primera vez en la historia, la mayoría de las personas, en casi todo el mundo, pueden esperar vivir hasta los setenta años e incluso más; que, a su vez, en 2050, en España, el número de personas de más de 65 años se habrá incrementado un 80,4% hasta alcanzar los 15,2 millones, llegando al 36,4% respecto a toda la población, siendo la cifra más alta de toda Europa. Y que en la CAPV, según “Proyecciones de población 2026” (EUSTAT) el envejecimiento de la pirámide de edad puede sintetizarse en la conclusión de que en el horizonte de la proyección (2026) casi la mitad de la población vasca tendrá 50 o más años. “Por tanto, el envejecimiento de la población trabajadora es un fenómeno que está suponiendo uno de los cambios importantes que se están viviendo en el mundo del trabajo”, ha alertado.
Pero –y ese es el quid de la cuestión- tenemos que desarrollar estrategias que contribuyan no sólo a la sostenibilidad de la vida laboral, sino también a aprovechar el capital intelectual, científico y humano de este colectivo cada vez más numeroso que puede ser una fuente de oportunidades económicas y sociales para nuestro país.
La Vicelehendakari ha ofrecido otro ejemplo de diversidad: la de que hombres y mujeres tenemos condiciones y posiciones sociales y económicas diferentes en cuanto al trabajo. “La integración de la perspectiva de género en la prevención de riesgos laborales pasa necesariamente por investigar las áreas relevantes para las mujeres trabajadoras, no subestimar los riesgos laborales a los que se exponen, reducir su falta de participación en las decisiones sobre salud laboral y garantizar que las medidas preventivas adoptadas sean apropiadas”, ha destacado Mendía.
Y un tercer y último ejemplo: de un tiempo a esta parte, está teniendo lugar una eclosión del trabajo en entornos digitales, algo que las actuales circunstancias en que vivimos no han hecho sino potenciar y que es en sí misma una revolución del mundo del trabajo.
A día de hoy, el trabajo en plataformas digitales se proyecta en ámbitos como la logística, los servicios, la alimentación, el transporte, las mercancías, las finanzas, el aprendizaje, la salud y el bienestar, las instituciones, … y es difícil encontrar un entorno totalmente ajeno a ellas. “Y en este ámbito, junto a los riesgos laborales más generales (seguridad vial laboral o riesgos ergonómicos o higiénicos por mencionar algunos) identificamos factores de riesgo específicos. Algunos, vinculados con el uso de las propias plataformas (hiperconexión, monitorización, invisibilidad, falta de contacto social, precariedad); otros, relacionados con la organización del trabajo (aislamiento, reputación digital, algoritmos gestores, etc…). Todos ellos pueden facilitar la aparición de riesgos psicosociales como el estrés, el acoso sexual o el síndrome de estar quemado”, ha señalado.
Tras todo este bagaje, Osalan ha decidido dedicar su XI Curso de Verano en la UPV/EHU no ya a uno de los escenarios que plantea la diversidad sino a su conjunto, a la “Diversidad y Prevención de Riesgos Laborales” en el que, más allá de los ejemplos mencionados, se abordan otros aspectos como la diversidad cultural, las enfermedades psíquicas o la discapacidad física, con el objetivo de identificar las acciones a desarrollar para garantizar la PRL en diferentes ámbitos de diversidad.
