La Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco presenta el Plan de Vialidad Invernal 2017-18

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Se activarán más de trescientos recursos móviles que incluyen quitanieves, grúas, patrullas y vehículos de apoyo y vigilancia

La Directora de Tráfico del Gobierno Vasco, Sonia Díaz de Corcuera, ha presentado esta mañana el Plan de Vialidad Invernal 2017-18 en una reunión de trabajo celebrada en Bilbao, en el Centro de Gestión de Tráfico de Euskadi. A la misma han asistido representantes de la Ertzaintza, Diputaciones Forales, Autopistas, Atención de Emergencias y Meteorología y Gobierno central. En total, se dispondrá de más de 300 recursos móviles para hacer frente a las situaciones de nevadas.

Sonia Díaz de Corcuera ha expuesto las directrices generales del Plan de Vialidad Invernal, que incluyen las condiciones de activación del Plan (cota de nieve por debajo de los 1.000 metros), la movilización de 170 máquinas quitanieves por parte de las Diputaciones Forales y Autopistas, y la activación, desde el CGTE,  de siete grúas pesadas para la retirada de vehículos de gran tonelaje. Para las tareas de coordinación y vigilancia, las Diputaciones Forales y Autopistas contarán además con 130 vehículos de apoyo. Por su parte, la Ertzaintza pondrá a disposición del operativo las patrullas de las Unidades de Tráfico, cuyo número se reforzará en la Fase Operativa y podrán ser apoyadas por los recursos de las comisarías.

En el invierno 2016-2017 el Plan se activó ocho veces

En el encuentro se ha presentado el balance del pasado ejercicio 2016-17. La Dirección de Tráfico activó el Plan de Vialidad Invernal en 8 ocasiones en Fase de Seguimiento e Información y de ellas 6 veces se pasó a la Fase Operativa (por descenso de cota de nieve por debajo de los 700 metros). Los problemas circulatorios fueron escasos. Las grúas pesadas con carácter preventivo se movilizaron únicamente en dos ocasiones (la media habitual era de 11 movilizaciones).

El primer episodio de nieve tuvo lugar entre los días 6 y 8 de noviembre, con la cota de nieve situada en torno a los 800 metros, sin problemas circulatorios relevantes. Entre los días 23 y 24 de noviembre se pasó por primera vez a la fase operativa, al estar situada la cota de nieve entre los 400-600 metros. Se registraron precipitaciones muy abundantes y puertos como Herrera, Zaldiaran y Gatzaga permanecieron cerrados para todo tipo de vehículo durante la mañana del 23.

En enero de este año, entre los días 13 y 22, también hubo activaciones del Plan. Concretamente, la fase operativa fue activada en 2 ocasiones (durante los días 13-15 y el martes 17), si bien la nieve no originó incidentes significativos en la red viaria de Euskadi. Sin embargo, las precipitaciones originaron varios desprendimientos de tierra y rocas como el ocurrido en la AP-68, a la altura de Ugao-Miraballes, en la madrugada del día 17 que obligó a cortar los carriles derecho y central de la autopista AP-68, en sentido Bilbao, durante varias horas. En Álava, varias carreteras secundarias se inundaron. En Gipuzkoa, se registró el desprendimiento del techo de un túnel de la carretera N-634 entre Zarautz y Getaria, siendo necesario habilitar un paso alternativo.

En febrero, entre los días 5 y 9, con la cota de nieve situada sobre los 600 metros, la fase operativa fue activada en 2 ocasiones (el día 5 y entre el 7-8). Hubo cierres de puertos de montaña, fundamentalmente para vehículos pesados.

Durante el mes de marzo se registraron otros 3 episodios de nieve: entre el 3-4, el 22-23 y el 24-26, con activación de la fase operativa en el último caso, por descenso de la cota de nieve hasta los 600 metros. En ninguno de los 3 episodios de marzo se registraron incidencias de relevancia en las carreteras vascas, al tratarse de temporales de corta duración.

El último episodio de nieve tuvo lugar entre el 26-27 de abril, con la cota de nieve situada entre los 700-1000 metros, pero con precipitaciones de carácter débil que tampoco llegaron a generar complicaciones circulatorias destacables.

Consejos para el periodo invernal

En condiciones meteorológicas adversas, hay que extremar la prudencia: modere la velocidad y aumente la distancia con respecto a los automóviles que circulan delante. Piense que con el piso mojado se necesita más espacio para detener el vehículo.

Ante la lluvia, unos neumáticos desgastados no desplazan bien el agua y pueden ser la causa de un accidente. Por eso, hay que sustituirlos periódicamente.

Las escobillas de los limpiaparabrisas deben estar siempre en buenas condiciones. No debemos esperar a que empiece el mal tiempo para cambiarlas.

Frente al hielo, la mejor medida de seguridad que se puede tomar en días de mucho frío es conducir con la máxima precaución, previendo su presencia sobre todo en determinados tramos.

Cuando el hielo aparece, ni tan siquiera los modernos sistemas como el ABS o la tracción total nos liberan del peligro de sufrir un patinazo, por lo que no cabe más que disminuir la velocidad y aumentar la prudencia.

Los neumáticos de invierno mejoran la seguridad y la movilidad. Aportan una mejor tracción, frenada y control con agua, escarcha, hielo y nieve. Si no se han montado los neumáticos de invierno, en épocas de nevadas es necesario llevar cadenas en los vehículos y saber colocarlas.

Es fundamental evitar los frenazos bruscos y circular a gran velocidad. Se tiene que intentar frenar de forma suave y gradual para que las ruedas no se bloqueen. Si esto sucede, el vehículo quedará fuera de control. Ante lo cual, se debe soltar el pedal del freno para recuperar la tracción y usar el freno de motor alternándolo con el pedal del freno.

En el arranque con nieve, se debe acelerar poco a poco. Si las ruedas patinan, se debe subir a una velocidad superior para reducir la fuerza que se aplica a las ruedas.