El Gobierno Vasco prioriza la atención sociosanitaria de calidad a colectivos diana

11 de abril de 2018

  • Así lo recoge el documento de Prioridades Estratégicas Sociosanitarias 2017-2020, presentado hoy en el Parlamento Vasco y que detalla la labor de las instituciones vascas en las personas con mayores necesidades en el ámbito sociosanitario
  • Acción coordinada de los departamentos de Empleo y Políticas Sociales y de Salud
  • “El propósito es promover un espacio de innovación en el ámbito sociosanitario que estimule la generación de conocimiento entre todos los niveles asistenciales y ámbitos profesionales y ciudadanos”.
  • Respuestas innovadoras a los retos de la atención sociosanitaria

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El Gobierno Vasco prioriza la atención sociosanitaria de calidad a colectivos más vulnerables, en un contexto demográfico cada vez más marcado por el envejecimiento, la cronicidad y la dependencia.  Los objetivos fundamentales de las medidas contempladas en el documento “Prioridades Estratégicas de Atención Sociosanitaria 2017-2020”, han sido presentados  hoy, en sesión conjunta ante las Comisiones de Salud y de Empleo, Políticas Sociales y Juventud del Parlamento Vasco, por los departamentos de Empleo y Políticas Sociales y de Salud.

La viceconsejera de Políticas Sociales, Lide Amilibia, y el asesor de Programas Sanitarios y Relaciones Ciudadanas del Departamento de Salud,  Guillermo Viñegra, han sido los encargados de detallar el contenido de un texto que refleja el compromiso firme de las instituciones vascas por una atención sociosanitaria de calidad”.

Ambos ponentes han recordado “el esfuerzo que las instituciones vascas realizan en este ámbito a lo largo de más de dos décadas, en las que, superando barreras competenciales y de diseño de servicios, se ha construido un nuevo marco más efectivo, coordinado y sostenible.

Según han remarcado, “ahora es preciso orientar esa estrategia hacia las personas y, en especial, hacia aquellos colectivos considerados diana, por sus mayores necesidades en el ámbito sociosanitario: personas con discapacidad o dependencia, personas con trastorno mental grave, personas en riesgo de exclusión y desprotección, niños/as con necesidades especiales, y otros colectivos con  necesidades sociosanitarias como las enfermedades raras, o el final de la vida, etc.”.

El documento presentado hoy recoge un total de 17 proyectos estratégicos, todos ellos encaminados a cubrir 6 prioridades.

 

Coordinación

El documento presentado define una hoja de ruta en la coordinación sociosanitaria “que sirva para establecer los itinerarios y las relaciones, funcionales y estructurales, entre los diversos niveles del sistema de coordinación y atención sociosanitaria: desde la estructura directiva y ejecutiva representada por el Consejo Vasco de Atención Sociosanitaria (CAVSS) hasta el nivel de la atención concreta, representado por los y las profesionales de la atención primaria social y sanitaria”.

Según han detallado Amilibia y Viñegra “estructurar estos niveles dotándolos de seguridad jurídica y empoderándolos es el objetivo teórico de esta prioridad, que en la práctica se traduce en tres proyectos estratégicos: definir un modelo de gobernanza sociosanitaria práctico en todos los niveles de intervención y ejecución, que se acompañará de un mapa de los y las profesionales referentes en cada ámbito de atención; dotar a ese modelo de una personalidad jurídica, con la aprobación de un Decreto para el desarrollo de la atención sociosanitaria en Euskadi; y formalizar jurídicamente la Comisión sociosanitaria coordinadora de Comités de Ética de Euskadi.

 

Recursos

“Además –han añadido en su presentación- se da un espacio a los recursos propiamente sociosanitarios, para lo cual se plantean dos proyectos clave: la redefinición y aprobación de un catálogo de recursos e intervenciones sociosanitarias, y la definición y consenso en torno a un marco de financiación estable para los recursos sociosanitarios”.

 

Atención

El objetivo planteado en el documento es acercarse a los colectivos con más necesidades sociosanitarias: las personas con trastornos mentales graves, las personas en situación de desprotección, las personas en situación de dependencia, las personas con una discapacidad, las personas en situación de final de la vida, los niños y las niñas con necesidades especiales o las personas con enfermedades raras; pero también aproximarse simultáneamente a las personas profesionales, a su comunicación, a sus lugares de encuentro y a las herramientas que requiere el espacio sociosanitario.

Esta tercera prioridad reúne un total de 8 proyectos estratégicos, algunos iniciados y otros nuevos: la actualización de la guía de protocolos sociosanitarios; el despliegue de Osabide en residencias; el despliegue de la herramienta de valoración sociosanitaria InterRAI-CA; la elaboración de un manual para el desarrollo de las comisiones sociosanitarias; el desarrollo de un piloto de tiempo de trabajo conjunto sociosanitario; el desarrollo e implantación de la Historia Sociosanitaria; el diseño de rutas asistenciales sociosanitarias específicas para cada colectivo diana; las rutas asistenciales no presenciales. 

 

Prevención y participación

La cuarta prioridad estratégica concibe la prevención sociosanitaria desde la activación de intervenciones de naturaleza diversa y complementaria -económico-financieras, familiares, de ocio, comunitarias, de vivienda, en salud, entre otras- conjugando el enfoque poblacional con los ajustes individuales en función de cada perfil de riesgo. Estas actuaciones preventivas individuales, gestionadas por el sistema social, el sanitario y la propia persona, serán determinantes para evitar o retrasar las demandas de atención sociosanitaria.

 

Evaluación

“La realidad de la atención sociosanitaria en la actualidad es aproximativa y basada en la observación y la recogida de testimonios. El objetivo sería consolidar el conocimiento de esa realidad a través de una aproximación cuantitativa y cualitativa, fundamentada en indicadores que permitan objetivar las características de la atención y las necesidades a las que dar respuesta” han indicado Amilibia y Viñegra.

Para ello, plantean como prioridad esencial “el desarrollo de un marco de conocimiento y colaboración interinstitucional y participación profesional y ciudadana, mediante un cuadro de mando nutrido de indicadores de seguimiento y resultado de las acciones que se desarrollan, y una encuesta de satisfacción dirigida tanto a las personas usuarias de los recursos sociosanitarios como a los y las profesionales que hacen posible esa atención”.

 

Innovación.

“Por último – han concluido - el propósito es promover un espacio de innovación en el ámbito sociosanitario que estimule la generación de conocimiento y pueda difundirse a todos los niveles asistenciales y ámbitos, tanto profesional como ciudadanía. Todo ello, de cara a dar respuestas innovadoras a los retos que plantea la atención sociosanitaria”.

 

Documento íntegro: pinchar aquí