El consejero de Cultura y Política Lingüística, Bingen Zupiria, participa en la presentación del proyecto de protección de la Parte Vieja de Donostia-San Sebastián

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11 de abril de 2018

-          El consejero Bingen Zupiria y el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, han presentado hoy la propuesta que define los pormenores de esta protección.

-          Una vez resueltas las alegaciones, el Ejecutivo aprobará formalmente esta declaración, que destaca “el armónico diseño” del entorno a proteger.

-          El documento incluye seis niveles de protección, desde el más básico hasta la protección especial de edificios como las iglesias de San Vicente y Santa María

          

El Gobierno Vasco y el Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián han presentado hoy el proyecto de protección de la Parte Vieja y el muelle de la capital guipuzcoana, un expediente que permitirá la calificación de este entorno como Conjunto Monumental. El documento acordado entre la dirección de Patrimonio del Departamento de Cultura y Política Lingüística del Gobierno Vasco y el consistorio donostiarra se publicará en el Boletín Oficial de Euskadi en las próximas semanas, y a partir de ese momento pasará a un periodo de alegaciones. Resueltas las alegaciones, el Gobierno Vasco aprobará formalmente por decreto esta declaración de protección.

El consejero de Cultura y Política Lingüística, Bingen Zupiria, y el alcalde de Donostia, Eneko Goia, han sido los encargados de presentar esta propuesta de protección en una presentación que ha tenido lugar en el Antiguo Ayuntamiento, en la Plaza de la Constitución. “Este lugar en el que nos encontramos es el corazón, el centro, de un conjunto que mantiene sus características fundamentales y que, desde el punto de vista patrimonial, cuenta con valores que merecen ser protegidos”, ha señalado el primer edil.

No en vano, el documento, la base sobre que la se establecerá la futura protección, indica que “el Casco Histórico cuenta con valores históricos, arquitectónicos y urbanísticos reflejados en su traza urbana, en la propia homogeneidad del conjunto que otorga valor a edificios que individualmente pueden resultar algo más discretos, en la calidad arquitectónica de sus notables construcciones, en el armónico diseño de una arquitectura residencial de concepción neoclásica o en las construcciones anteriores a 1813”. Según ha indicado el consejero Zupiria, “la Parte Vieja constituye un bien cultural que responde a su trayectoria histórica asociada a una serie de acontecimientos y a un escenario físico a proteger”.

El alcalde donostiarra ha remarcado la importancia de la aprobación de esta  propuesta de protección: "Se trata de un expediente que otorga a la Parte Vieja de Donostia el nivel de protección que se merece. El Casco Histórico que hace doscientos años diseñó el arquitecto Pedro Manuel de Ugartemendia tiene ya el paraguas legal que va a fortalecer su esencia, su idiosincrasia y sus características singulares. Esta es la pieza que faltaba en el puzzle del patrimonio cultural vasco”.

La delimitación

Esta propuesta de protección delimita el espacio objeto de esta calificación como Conjunto Monumental, un perímetro cuadrangular al que se une el muelle de la ciudad y que cuenta con los siguientes límites: desde la esquina sur del edificio de la Sociedad Fotográfica (calle San Juan) hasta el Boulevard; desde este entorno (esquina San Juan-Boulevard) en línea recta hasta los muelles; el entorno más próximo al mar tiene como límites los muelles hasta el comienzo del paseo del Muelle (junto a la lonja nueva), la Cofradía, el espigón suroeste y la totalidad del Aquarium; y, finalmente, el perímetro se cierra incluyendo el muelle de los Curas, las escuelas Monte Urgull, las Casa del Guarda y el Museo San Telmo.

A la hora de delimitar el espacio a proteger como Bien Calificado se ha tenido en cuenta la confluencia de valores de interés cultural, la coherencia con la concepción neoclásica de la Parte Vieja y se ha valorado, asimismo, el indudable interés del muelle como parte inseparable de la ciudad medieval y base económica de sus habitantes durante siglos. “Es evidente que la Parte Vieja y el Muelle son morfológicamente diferentes entre sí, pero se decide calificarlas de forma conjunta porque comparten elementos complementarios y están conectados por elementos comunes”, ha indicado el consejero Zupiria.

Actuación armonizada

Este documento parte de la evolución histórica de la Parte Vieja, pero “tiene en cuenta a su vez su configuración actual, sus características y particularidades”. El objetivo de este expediente de protección es ofrecer un equilibrio entre la conservación de la morfología de la Parte Vieja y la flexibilidad a la hora de gestionar las necesidades de los 4.000 vecinos que residen en este entorno. De esta manera, esta protección va a ofrecer una mayor seguridad jurídica al conjunto de actuaciones que se desarrollen, al tiempo que va a permitir una actuación urbanística armonizada desde el punto de vista de la protección y también desde la perspectiva del uso ciudadano.

La declaración de Conjunto Monumental se realizará al amparo de la Ley 7/1990 del Gobierno Vasco de Protección del Patrimonio Cultural. Así, los planeamientos urbanísticos que se desarrollen deberán ajustarse en lo sucesivo al régimen establecido en la calificación y deberán contar con el informe correspondiente de la Dirección de Patrimonio Cultural del Gobierno Vasco. La protección establece, asimismo, que toda actuación a ejecutar en espacios públicos potenciará el carácter y la estructura urbana de los mismos, integrando y armonizando el mobiliario urbano con el carácter ambiental del  conjunto.

El expediente de protección regula todos los aspectos relativos a la rehabilitación, demolición, el uso o la actividad. En lo que a las parcelaciones se refiere, se mantendrá con carácter general el esquema de parcelación existente, al ser considerada su permanencia una circunstancia digna de valoración en sí misma. Esta protección no permitirá la modificación de las alineaciones actuales, ya que la trama urbana resulta ser uno de los rasgos característicos de un Conjunto Monumental.

Niveles de protección

El decreto relativo a la calificación del Casco Histórico como Conjunto Monumental establece diferentes niveles de protección en función del valor arquitectónico de cada uno de ellos (se adjunta el listado), desde la protección más básica hasta la declaración de bienes con protección especial. Los seis niveles de protección son los siguientes: especial, protección media, básica, morfológica, espacios urbanos y discordancia (para aquellos inmuebles que incumplen la obligación legal del deber de adaptación de las edificaciones al entorno).

Entre los de protección especial están, por ejemplo, las iglesias de San Vicente y Santa Maria, San Telmo, Santa Teresa o la biblioteca. Entre los de protección media, cabe mencionar los conjuntos residenciales de la plaza de la Constitución, el teatro Principal, la Ermita del Muelle, la Plaza de la Trinidad, el Aquarium o el Museo Naval. Por último, la mayor parte de los edificios residenciales están catalogados como de protección básica, ya que se entiende  que no tienen un valor relevante, si bien es interesante su consolidación individual al formar parte de un conjunto patrimonial.

Todos los edificios incluidos en los diferentes niveles de protección estarán sujetos en cuanto a autorización, uso, actividad, defensa, sanciones, infracciones y demás extremos previstos en la Ley. Los propietarios de los bienes afectados estarán obligados al cumplimiento de las obligaciones de conservación, cuidado y protección impuestas por esta regulación.

La propuesta que permitirá la declaración como Conjunto Monumental señala que en las calles se priorizará la peatonalización y el mantenimiento del adoquinado –donde aún lo hubiere-. Además, remarca la importancia de la puesta en valor de los edificios de las plazas, puesta en valor de las murallas, viaductos fuentes y monumentos, puesta en valor del arbolado y jardinería.

Aspiración histórica

A través de la protección de la Parte Vieja donostiarra y el muelle se cumple una vieja aspiración, tanto del Gobierno Vasco como del Ayuntamiento. El expediente de declaración del Casco Histórico / Parte Vieja como conjunto histórico-artístico se encontraba incoado desde agosto de 1987. El trabajo “serio, riguroso y exhaustivo” realizado durante los últimos años por parte del Gobierno Vasco y el Ayuntamiento, a través de su Departamento de Urbanismo, ha permitido avanzar de cara a la consecución de esta declaración. En este proceso han colaborado, además, los arquitectos Luis Sesé y María Escalada, con un profundo conocimiento histórico de la ciudad y su patrimonio histórico y urbanístico.

La evolución histórica

La Parte Vieja actual tiene su origen en la reconstrucción planeada tras la quema y destrucción casi total de la ciudad en 1813. El arquitecto Ugartemendia fue el encargado de diseñar de nuevo la ciudad estableciendo unas ordenanzas edificatorias que son la base de la actual Parte Vieja. En su actual configuración actual, según recuerda el expediente de protección, las edificaciones mantienen elementos identificadores  que responden a las ordenanzas de Ugartemendia: base de piedra sillar hasta planta primera, disposición regular de huecos verticales alineados a ejes recercados con sillería en calles principales, pilastras de sillar en esquinas rematadas con ménsulas y con hendidura para alojar la bajante de pluviales, alero con canes de madera.

Este trabajo recuerda también que el Casco Histórico de Donostia cuenta con la particularidad de ser la primera villa de fundación guipuzcoana, y surge de la evolución de la estructura urbana generada por el asentamiento situado al pie del Monte Urgull, condicionada por la trayectoria histórica, económica así como por factores naturales.